La
Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional
aplazó este martes la solicitud de medidas cautelares contra 10 agentes de la
Policía Nacional implicados en la Operación Pandora. Estos agentes están
acusados de sustraer más de 900,000 proyectiles de la institución. En el
expediente, de 213 páginas, el Ministerio Público detalla la participación de
cada imputado, incluyendo a la empresa Tactical Accessories RH,
vinculada a uno de los acusados.
El líder
de la red: coronel Narciso Antonio Feliz Romero
El
principal acusado, el coronel Narciso Antonio Feliz Romero, dirigió el
Departamento II de Intendencia de Armas de la Policía Nacional desde noviembre
de 2023 hasta octubre de 2024. Según la investigación, fue el creador de una
red criminal conformada por miembros activos de la Policía, quienes desviaron
municiones y material bélico bajo su custodia para su venta ilegal, además de
incurrir en lavado de activos.
El
Ministerio Público señala que Feliz Romero, con ayuda de otros oficiales,
sustrajo municiones que vendió con la complicidad de varios miembros del cuerpo
policial. El coronel ordenó manipular auditorías y falsificar inventarios para
ocultar las irregularidades. Además, coordinó la confección de cajas falsas
para encubrir la falta de municiones. Entre las armas que retuvo ilegalmente
figuran un fusil Colt M-16 y una ametralladora Sig Sauer, que
posteriormente devolvió durante la investigación.
Otras
acusaciones y movimientos ilegales
La
acusación detalla cómo Feliz Romero, junto a otros miembros de la red, ocultó y
vendió ilegalmente municiones. Los agentes involucrados realizaron
transferencias bancarias y usaron efectivo para recibir pagos por la venta de
material bélico. Algunos de los acusados, como el cabo Melvin Manuel Sierra
Gil, confirmaron estas transacciones a través de testimonios, revelando la
complicidad de varios subalternos.
El 24 de
octubre de 2024, en medio de la investigación, el coronel y otros oficiales
intentaron ocultar pruebas trasladando municiones para falsificar inventarios.
Además, se descubrió que Feliz Romero tenía la intención de vender un fusil
Colt M-16 por RD$195,000 a través de grupos de WhatsApp.
Retorno
de armas y cierre de filas
El 10 de
noviembre de 2024, Feliz Romero devolvió a la Intendencia varias armas de
fuego, entre ellas un fusil Colt M-16 y una ametralladora Sig Sauer. Otros
acusados, como el capitán Nelson Valdez, también devolvieron municiones
sustraídas, siguiendo las instrucciones del coronel.
Participación
de otros acusados
El
expediente detalla la implicación de otros oficiales como Juan Miguel Soler
Pérez, quien fungió como sub-intendente y colaboró en el ocultamiento y
comercialización ilegal de municiones. Nelson Valdez, a cargo de los
depósitos de armas, instruía a sus subordinados en técnicas para sustraer
material bélico.
Conclusión
del caso Pandora
El
Ministerio Público ha solicitado medidas de coerción contra 11 personas,
incluyendo oficiales de alto rango y la empresa Tactical Accessories RH. Las
investigaciones continúan, mientras se espera la fecha definitiva para la
audiencia de medidas cautelares.