El
presidente Joe Biden ha autorizado el uso de misiles ATACMs de largo alcance
por parte de Ucrania para ataques en territorio ruso. Esta decisión representa
un cambio en las restricciones previas que limitaban el uso de armamento
estadounidense. La autorización se produce en un contexto en el que Rusia está
utilizando miles de soldados norcoreanos para apoyar su ofensiva en Ucrania. El
presidente ruso, Vladimir Putin, ha desplegado estas fuerzas en la región norte
de Ucrania, buscando recuperar territorio controlado por las fuerzas
ucranianas.
El anuncio
llega tras la victoria electoral de Donald Trump en las elecciones
presidenciales de Estados Unidos. Trump ha expresado su intención de finalizar
la guerra rápidamente, generando incertidumbre sobre el futuro del apoyo
militar estadounidense a Ucrania. La participación de Corea del Norte en el
conflicto ha sido uno de los temas discutidos en reuniones recientes entre
Estados Unidos, Corea del Sur, Japón y China. Esto también ha sido mencionado
por el Secretario General de la ONU, António Guterres, quien aboga por una paz
justa.
Los misiles
ATACMs proporcionados a Ucrania son limitados, lo que podrÃa significar que
solo se utilizarán en ataques selectivos. Sin embargo, incluso unos pocos
ataques en territorio ruso podrÃan obligar a las fuerzas rusas a cambiar sus
despliegues y tácticas. El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, ha
mantenido una postura discreta sobre el tema, señalando que los resultados se
verán en el campo de batalla en lugar de en declaraciones públicas. Además, ha
expresado sus condolencias por las vÃctimas de recientes ataques rusos en
Ucrania.
El artÃculo
muestra la creciente complejidad del conflicto y cómo las decisiones
estratégicas y polÃticas influyen en el curso de la guerra. La colaboración
internacional y las tensiones geopolÃticas siguen siendo factores cruciales en
la evolución de la situación en Ucrania.