Washington,
EE.UU. — En su tercer intento por regresar a la Casa Blanca, Donald Trump, a
sus 78 años, se mantiene como una figura indomable en la política
estadounidense. A pesar de múltiples procesos legales, una condena penal y dos
intentos de asesinato, ha consolidado nuevamente su poder dentro del Partido
Republicano, incluso frente a los que alguna vez lo abandonaron tras el asalto
al Capitolio en 2021.
Trump ha
logrado cultivar un fuerte vínculo con su base, compuesta principalmente por
votantes mayores y de clase trabajadora, a quienes ofrece una narrativa de
lucha y resistencia frente a un Estados Unidos que describe como sumido en la
crisis. En sus discursos, critica duramente la situación económica y la
política migratoria, al tiempo que amplía su influencia entre los jóvenes
mediante una estrategia mediática en redes sociales.
Su estilo
controversial y su lema de "Estados Unidos primero" han fortalecido
su imagen de candidato antisistema, que desafía el establishment político. Sin
embargo, la incertidumbre rodea las elecciones de 2024: ¿será esta la
oportunidad de una sorprendente victoria o de un posible regreso a las batallas
legales?
