Una delegación de Hamás comunicó a funcionarios egipcios en El Cairo su disposición a cesar los combates en Gaza, con la condición de que Israel acuerde un alto el fuego y retire sus tropas de la Franja. Además, Hamás solicita el regreso de los desplazados, un intercambio de prisioneros y la entrada de ayuda humanitaria.
Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, destacó los esfuerzos de Egipto en las negociaciones. Este avance llega tras la muerte del líder de Hamás, Yahya Sinwar, en un ataque israelí, lo que ha reactivado los contactos diplomáticos entre Egipto, Catar y Estados Unidos.
Por otro lado, el conflicto en Líbano también se intensifica, con bombardeos israelíes en el sur del país, en respuesta a ataques de Hezbolá. El ejército israelí informó la muerte de cinco de sus soldados en enfrentamientos, elevando a 27 las bajas desde el inicio de la ofensiva terrestre. El gobierno libanés ha confirmado al menos 1,552 muertes y cerca de 800,000 desplazados debido al conflicto.
La ONU sigue
de cerca la situación, mientras Estados Unidos y otros mediadores buscan
soluciones diplomáticas para frenar la escalada en Gaza y Líbano, donde la
tensión se mantiene alta y las operaciones militares no cesan.
