El presidente Donald Trump habla con el
director general de Tesla y SpaceX, Elon Musk, en la Casa Blanca en Washington,
el 3 de febrero de 2017. (Foto AP/Evan Vucci, Archivo)
Musk,
quien anteriormente era crÃtico de Trump, dijo que la fuerza del candidato
republicano, que demostró en su reacción al atentado del mes pasado, era
fundamental para la seguridad nacional.
Por STEVE PEOPLES
y MEG KINNARD Associated Press
NUEVA YORK . —
Donald Trump narró su intento de asesinato con vÃvidos detalles, y prometió
la deportación más grande en la historia de Estados Unidos durante su regreso a
la red social anteriormente conocida como Twitter, en una conversación que se
vio plagada de fallas técnicas.
“Si no hubiera volteado la cabeza, ahora mismo no estarÃa hablando
contigo, por mucho que me caes bien”, comentó Trump al propietario de la red
social X, Elon Musk.
Musk, quien anteriormente era crÃtico de Trump, dijo que la fuerza del
candidato republicano, que demostró en su reacción al atentado del mes pasado,
era fundamental para la seguridad nacional.
“Hay
personajes realmente duros ahà fuera”, dijo Musk. “Y si no creen que el
presidente estadounidense es duro, harán lo que quieran”.
La
conversación pública entre Trump y Musk, que fue mayormente amigable, reveló
pocas novedades sobre los planes de Trump para un segundo mandato. El
expresidente pasó gran parte de la plática discutiendo su reciente intento de
asesinato, la inmigración ilegal y las regulaciones gubernamentales.
Aun asÃ, la
conversación puso de manifiesto lo mucho que ha cambiado el panorama polÃtico
de Estados Unidos menos de cuatro años después de que Trump fue expulsado
permanentemente por la anterior administración de la red social por haber
propagado información falsa que derivó en el asalto al Capitolio federal el 6
de enero de 2021 y socavó los cimientos mismos de la democracia estadounidense.
Ese tipo de
información falsa ha prosperado en X bajo la dirección de Musk.
La sesión
también pretendÃa servir como una forma para que el expresidente llegara
directamente a millones de votantes. También era una oportunidad para que X,
una plataforma que depende en gran medida de la polÃtica, se redimiera tras
algunas dificultades.
Pero no
empezó como estaba planeado.
HabÃa 878.000
usuarios conectados a la conversación más de 40 minutos después de la hora de
inicio prevista, pero no se estaba transmitiendo ninguna entrevista hasta
entonces. A muchos usuarios les apareció un mensaje que decÃa: “Detalles no
disponibles”.
El equipo de
Trump publicó que la “entrevista en X se vio desbordada con los usuarios que se
conectaron”. Y una vez que la reunión empezó, Musk se disculpó por la demora y
señaló que habÃa sido causada por un “ataque masivo” que desbordó el sistema de
la compañÃa.
Los
simpatizantes de Trump estaban visiblemente frustrados.
“¿¿¿No
disponible??? He planeado todo mi dÃa alrededor de esto”, escribió el
comentarista conservador Glenn Beck.
“Por favor
háganle saber a Elon que no podemos unirnos”, publicó el multimillonario gestor
de fondos de cobertura Bill Ackman.
Antes de su
conversación con Trump, Musk publicó en la plataforma que X estaba llevando a
cabo “algunos ajustes del sistema” para manejar lo que se esperaba que iba a
ser un gran número de participantes.
El
accidentado inicio recordó la conversación de mayo de 2023 en la red social
entre Musk y el gobernador de Florida, Ron DeSantis. El gobernador republicano
utilizó la plataforma para anunciar formalmente su candidatura a la
presidencia. Sin embargo, fue un desastre lleno de fallas técnicas que se vio
desbordado por las más de 400.000 personas que intentaron conectarse.
La rival
demócrata de Trump, la vicepresidenta Kamala Harris, señaló que Trump se burló
de DeSantis en ese entonces.
“¡Wow! ¡El
lanzamiento de DeSantis en Twitter es un desastre! Toda su campaña será un
desastre. ¡Estén atentos!”, escribió Trump en un mensaje republicado el lunes
por el equipo de campaña de Harris.
La reunión
del lunes también puso de relieve la evolución de la relación personal entre
Trump y Musk, dos de los hombres más poderosos del mundo, que han pasado de ser
rivales acérrimos a aliados en el lapso de una temporada electoral.
Musk, que se
habÃa descrito a sà mismo como “demócrata moderado” hasta hace poco, insinuó en
2022 que Trump era demasiado viejo para volver a ser presidente. Aun asÃ, Musk
apoyó formalmente a Trump dos dÃas después de su intento de asesinato el mes
pasado.