agencia efeLima, Perú
La inteligencia artificial (IA) es una oportunidad para mejorar la
inclusión financiera en América Latina, si bien tiene algunas limitaciones a su
aplicación que deben considerarse, según coincidieron diversos expertos este
lunes en Lima.
"Hay
muchas oportunidades, pero todavía los software que tenemos de lo que se llama
hoy inteligencia artificial no están lo
suficientemente desarrollados y tienen muchos retos", explicó a EFE
Roxana Barrantes, profesora de Economía de la Pontificia Universidad Católica
de Perú (PUCP), tras participar en el 'Encuentro regional de desarrollo e
inclusión financiera' organizado por Credicorp.
Entre esos retos, la también integrante del directorio del
Banco Central de la Reserva de Perú (BRCP) citó que no se llega "a través
de la IA a lograr elementos de confianza que, en sociedades
tradicionales", como las latinoamericanas "son muy importantes".
En cambio,
destacó que la inclusión financiera "requiere productos casi
personalizados" y la IA "te puede ayudar a hacer esas
identificaciones".
"Tú puedes tener muchísima información de tu cliente,
que además te ayuda en una economía muy informal (como la peruana) y que tiene
que estar coqueteando mucho con lo ilegal. El conocer a tu cliente se convierte
en un elemento clave para la inclusión financiera", subrayó.
El profesor de Economía de la Universidad de Harvard Ricardo
Hausmann destacó que "la inteligencia artificial tiene la posibilidad de
hacer que la gente tenga muchísimo más acceso al conocimiento del que tiene
ahora y un acceso mucho más igualitario".
"Creo que es una tecnología que tiene un
potencial de ser muy incluyente, pero no sé si efectivamente vamos a ser
capaces de explotar esa capacidad", comentó.
Para conseguirlo, subrayó que "es importante que los
modelos de negocio que se desarrollen estén para complementar al ser humano y
no para sustituir al ser humano".
"Tenemos que tener mucho cuidado de las exageraciones
con nuevas tecnologías, porque, típicamente, ocurre una fase de auge donde la
gente se entusiasma demasiado y las tecnologías terminan dando muchos
beneficios, pero no necesariamente en los plazos y en la emoción que había en
un primer momento", aseguró.
Eso mismo,
recordó, "pasó con internet, que transformó la sociedad, pero no impidió
que, entre 1998 y 2001, se generó una burbuja que después explotó".
"Eso puede pasar aquí otra vez, pero sí creo que hay un
enorme beneficio de ponerse a pensar cuáles son los usos posibles de la IA que
generen nuevas oportunidades para la inclusión financiera", apostilló.
A puertas de un gran cambio
El
exdirector de estrategia de mercado de OpenAI Zack Kass aseguró que el mundo se
encuentra "a puertas de la revolución industrial más profunda de la
historia humana".
Kass destacó que, lo que distingue la IA de otros grandes
elementos que han cambiado la historia humana, es la velocidad con que
evoluciona.
Como retos que supone la IA, Kass citó una posible "idiocracia" (una reducción
de la inteligencia general), deshumanización, desplazamiento de puestos de
trabajos (y la identidad que aportan), así como un cierto existencialismo.
Entre los elementos positivos que pronostica que traerá la IA
mencionó una "forma enorme de avance científico", una mejora de la
productividad y satisfacción laboral, así como una gran deflación y mayor
disponibilidad de tiempo libre.