Los rescatistas de los Vigili del Fuoco, el Cuerpo de Bomberos italiano, patrullan en un pequeño bote en Porticello, cerca de Palermo, el 21 de agosto de 2024, dos días después de que se hundiera el yate de lujo con bandera británica Bayesian.AFP.
agencia afpPorticello, Italia
Cinco cuerpos fueron hallados este miércoles entre los restos del yate
de lujo del magnate británico de la tecnología Mike Lynch que
se hundió el lunes en Sicilia, reduciendo todavía más las posibilidades de
encontrar con vida al último desaparecido.
Los cinco
cadáveres, hallados por la tarde y aún sin identificar, elevan el balance de víctimas a seis muertos, tras la
recuperación el lunes del primer cuerpo.
Poco antes de que se anunciara el hallazgo de dos cuerpos
este miércoles, un periodista de AFP vio media docena de embarcaciones
abandonar en cuestión de minutos el puerto
de Porticello, lugar del naufragio al este de Palermo.
Algunos
regresaron más tarde y depositaron dos bolsas
para cadáveres en una carpa situada en el muelle.
Horas antes de la tromba marina ocurrida el lunes al
amanecer, se estaba llevando a cabo una fiesta en el "Bayesian",
el yate de 56 metros de eslora con bandera británica, anclado a 700 metros del
puerto de Porticello, con 12 pasajeros y 10 tripulantes a bordo.
Lynch, acaudalado hombre de negocios apodado el "Bill Gates británico", celebraba
con sus amigos, colaboradores y abogados su absolución en junio en un juicio
por fraude en Estados Unidos que
podría haberle costado años de prisión.
El barco se
hundió en minutos y 15 personas, incluidos nueve tripulantes, fueron
rescatadas. Otro miembro de la tripulación fue encontrado muerto.
Las seis personas que seguían desaparecidas el miércoles por
la mañana son Mike Lynch y su hija
Hannah, Jonathan Bloomer, presidente del consejo de administración de
Morgan Stanley International, así como su esposa y Chris Morvillo, un abogado
que defendió a Mike Lynch en su juicio en Estados Unidos, y su esposa.
Las operaciones de búsqueda continúan para encontrar al
último desaparecido, pero los bomberos indicaron que la operación estaba siendo
"larga y complicada".
Un jefe de los guardacostas, el capitán
Vincenzo Zagarola, ya había declarado el martes en la radio italiana
que era "difícil imaginar" que la búsqueda terminase bien.