Marileidy Paulino, campeona de los 400 metros planos en París 2024, hace una foto durante su recibimiento en el país. Fuente externa
El Aeropuerto Internacional de Las Américas (AILA), “le quedó chiquito”
a tres preseas olímpicas.
La tan
esperada llegada de los medallistas dominicanos en los juegos de París 2024,
Marileidy Paulino, Cristian Pinales y Yunior Alcántara no fue menos de lo que
se esperaba.
La algarabía se apoderó de los centenares de dominicanos que
acudieron desde diferentes partes del país, especialmente de Nizao, La Romana e
Higüey, para dar una calurosa bienvenida a sus dignos representanes en los
recién terminados Juegos Olímpicos.
El vuelo de los medallistas llegó puntual, 6:00 de la tarde,
pero fue una media hora después cuando Marileidy, Cristian y Yunior salieron
por la principal puerta que da vista a los que llegan, provocando
inmediatamente gran euforia.
No se
hizo el acto
Aunque desde horas antes había un lugar dentro del aeropuerto
destinado para que los medallistas hablaran al público y a la prensa luego de
sus destacadísimas actuaciones en París, el acto tuvo que cancelarse debido al
inquietante comportamiento de la multitud, que llegó a ser incluso hasta
sofocante para los medallistas, especialmente para la fémina.
A primera
instancia los medallistas fueron llevados “a empujones” a la plataforma que
estaba preparada para el acto, pero cuando la seguridad del aeropuerto y los
directivos del Ministertio de Deportes se percataron de la realidad de la
situación, decidieron dejar hasta el ahí el acto de bienvenida, aunque luego
prosiguió la caravana de los medallistas hacia sus pueblos.
“La Marileidymanía”
Aunque los boxeadores también tenían a muchas personas con
pancartas alusivas a ellos, la más esperada por la mayoría de los que estuvieron
en el aeropuerto y la que sucitó más atención una vez llegaron, fue la campeona
de los 400 metros planos femenil.
Con gritos
como “No pueden”, “Marileidy”, “Fue oro”, los presentes en el AILA demostraron
su gran admiración, amor y fanatismo por Paulino.
Pocas palabras
Entre las pocas cosas que tuvieron oportunidad de decir tanto
Marileidy como Pinales, ambos coincidieron en agradecer al gran apoyo brindado
por todos los dominicanos, antes, durante y después de los Juegos Olímpicos.
“Le doy
gracias a Dios porque todo salió como lo planeamos. Gracias a la República
Dominicana por este gran recibimiento, no solo a mí sino también a los
boxeadores”, dijo Marileidy.
“No hay
palabras para expresar este sentimiento. Ver tanta gente dádonos este apoyo es
más lindo que cómo lo imaginé”, sostuvo Pinales.
“Dios es bueno. Esta medalla cambió mi vida en todos los
sentidos”, expresó Alcántara.
Paulino ganó el oro y estableció una nueva marca olímpica en
la competición.
En tanto, Alcántara y Pinales, ganaron bronce en boxeo,
peleando en 51 kg y 80 kg, respectivamente.