Después de
20 años, los residentes en las comunidades de Guaigüí y Camú, en la provincia
La Vega, esperan la terminación de la estructura, a fin de recibir sus
beneficios. Fuente externa
En el período 2000-2004
durante el gobierno del presidente Hipólito Mejía, se inició la construcción de
la presa de Guaigüi. Sin embargo, tras más de 20 años, los residentes de esta
misma comunidad, en La Vega, esperan la terminación de la estructura.
Rafael Nieves, residente en
el sector y quien también participó en la fase inicial de la construcción de
esta obra, dijo que desde entonces ha pasado por varios proyectos, sin ninguna
esperanza de ser concluida.
“En el 2000 comenzamos a
trabajar y desde ese tiempo tienen de proyecto en proyecto y que la van hacer y
que la van hacer, pero yo no veo que la van hacer. Han pasado varios gobiernos
y no han hecho nada, para mí que ya no la van hacer”, expresó Nieves.
Los residentes de esta comunidad explicaron que no
cuentan con el suministro de agua, por lo que esperan la conclusión de la
presa, para recibir el preciado líquido.
Explicaron que para tener
acceso al servicio de agua necesitan comprar camiones cisterna, los cual les
cuestan un mínimo de 3 mil pesos, ya que de ese monto los choferes de camiones
no suben hasta Guaigüí.
La construcción de la
obra era también una fuente de empleo para los comunitarios, quienes
manifestaron que luego de su paralización muchos quedaron sin empleo.
En el lugar donde se
contruye la presa, se observa un letrero desgastado por el paso de los años, el
cual indica la ubicación de la contrucción junto a las oficinas del Instituto
Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) y un puesto del Ejército de la República
Dominicana, cuyos soldados bloquean e l paso hacia la obra.
La construcción de la presa
de Guaigüí representa la solución definitiva a la problemática de suministro de
agua en esta ciudad. Además, permitiría que miles de tareas de plantación
agrícola y ganadera sean irrigadas y generaría unos 300 megavatios de energía
eléctrica, de acuerdo Rafael Salazar, el ingeniero administrador de la Empresa
de Generación Hidroeléctrica Dominicana (EGEHID).
Este proyecto tiene como
objetivo mejorar la disponibilidad de agua para el riego y el abastecimiento de
agua potable para La Vega y otras comunidades, así como la generación de
energía renovable mediante el almacenamiento de agua en una presa a construir
con fines de aprovechamiento de las aguas del río Camú, en la parte alta de su
cuenca.
La obra contaría con dos
embalses y el superior se ubicaría en la altiplanicie de la loma El Mogote,
entre los ríos Camú y Yamí, mientras que el inferior se ubicará en el cauce del
río Camú, el cual estaría conformado por una presa de cierre, destinada a
definir su vaso de almacenamiento.
Conforme con el diseño
original, la presa de Guaigüí tendría una capacidad de embalse de alrededor de
53 millones de metros cúbicos de agua, para la generación de 300 megavatios de
energía limpia, la casa de máquinas estaría compuesta por cuatro turbinas de 75
megavatios cada una y un sistema de rebombeo.
ABINADER Y LA PRESA GUAIGÜÍ
El pasado 5 de febrero,
durante el encuentro con la prensa en LA Semanal, el presidente Luis Abinader,
informó que se están trabajando en la presa de Guaigüí. Sin embargo, explicó
que el contrato de la obra está en disputa desde hace varios años y actualmente
está en proceso de arbitraje internacional y mediación, por lo que están
buscando una solución.
Asimismo, dijo que el proyecto pasó del INDRHI a la
EGEHID, para la implementación de un nuevo sistema de rebombeo, que pueda
generar energía solar. La obra permitiría represar el río Camú en la parte
alta, en las comunidades Guaigüí y Camú.