Vista general de la lluvia cayendo frente a
la Torre Eiffel, en París, Francia, durante la ceremonia de apertura de los
Juegos Olímpicos de Verano de 2024, el viernes 26 de julio de 2024.
(Pascal Le Segretain/AP)
PARÍS —
Presumiendo ser la cuna de
una revolución, París puso en marcha el viernes sus primeros Juegos Olímpicos
de Verano en más de un siglo con una fastuosa e inédita ceremonia, que exhibió
la tenacidad de la ciudad durante un día que comenzó con un presunto sabotaje a
la red ferroviaria de alta de velocidad de Francia.
Pero el inicio de la gala a
las 7:30 de la noche despertó la euforia.
Francia decidió realizar
una audaz ceremonia, la primera fuera de un estadio. Docenas de gobernantes y
dignatarios hicieron acto de presencia y el resto del mundo estaba pendiente
del teatro al aire libre que París mostró.
Más de 6.000 deportistas
iniciaron el desfile sobre las aguas del río Sena, en un recorrido por los
lugares más emblemáticos de la ciudad que se concibió para agigantar el ego de
los franceses.
En los márgenes del Sena y
desde los balcones, los espectadores reaccionaron fascinados con el paseo de
las embarcaciones.
Nada parece librado al azar, salvo
por dos asteriscos: la seguridad y el clima.
Una serie de ataques vandálicos en la red francesa de
trenes de alta velocidad que afectaron el traslado de un cuarto de millón de
pasajeros en las primeras horas del viernes puso en máxima alerta a las
autoridades francesas, quienes buscan determinar si tienen alguna relación con
los Juegos.
Los reportes oficiales indicaron que se produjeron
varios incendios y se habían encontrado dispositivos incendiarios cerca de las
vías de las líneas de alta velocidad Atlántica, Norte y Este, que conectan
París con el resto de Francia y países vecinos.
París, que ha sufrido sangrientos atentados en este
siglo, afronta un reto mayor de seguridad debido a la tensión internacional por
la guerra de Rusia en Ucrania y el conflicto en Gaza entre Israel y Hamas.
También hay alerta por eventuales protestas en medio de un agitado clima
político tras las elecciones legislativas de principios de julio.
Unos 45.000 agentes de policías y 10.000 soldados
fueron desplegados para garantizar la seguridad de una concurrencia
multitudinaria – se esperan unos 300.000 espectadores, además de los
mandatarios extranjeros invitados — en las márgenes del Sena y puntos aledaños.
Aviones caza, drones de vigilancia y helicópteros con
francotiradores eran los únicos autorizados a sobrevolar el cielo de la capital
francesa durante la jornada.
El Campo de Marte, a los pies de la Torre
Eiffel, antes de la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París,
jueves 25 julio de 2024.
(Martin Meissner/AP)
En lo que respecta al clima, el servicio meteorológico
local alertó de precipitaciones durante la apertura de los Juegos. La fiesta no
se cancelará si así fuera.
“Desde luego que cuando organizar una gala al aire
libre, prefieres tener un clima ideal”, dijo Tony Estanguet, el director del
comité organizador de los Juegos, a la radio France Inter. Pero la ceremonia
“se elaboró para poder realizarse bajo la lluvia”.
La mexicana Daniela Rodríguez, de 27 años, sonreía y
se tomó fotografías junto a sus padres Elías Rodríguez y Alicia Luna con el
Sena de fondo a pocos metros del puente Alexandre III.
Lebron James previo a la ceremonia de
inauguración de los Juegos Olímpicos de París, el viernes 26 de julio de
2024.
(Quinn Rooney/AP)
Hace siete años la joven había llegado a París para
perfeccionar su francés y se cruzó al presidente Emmanuel Macron en un evento
promocional de la candidatura de la ciudad para organizar los Juegos. Cuando
ganó la postulación, se prometió volver junto a sus padres para vivir la
experiencia deportiva.
“Le toqué la mano (a Macron). Unas
semanas después les dieron los Jue La familia, que reside
en Nueva Jersey, asistirá a las competencias de equitación, semifinales de
tenis y natación.
Salvo por la llovizna que los obligó a refugiarse en
uno de los locales de comida a la ribera del río antes del comienzo de la
ceremonia y deleitarse con unos aperitivos, la familia estaba encantada con el
clima de los Juegos y si bien están atentos a las advertencias sobre la seguridad,
prefieren disfrutar.
“Un poquito de miedo sientes, pero tristemente te
acostumbras”, afirmó Luna.
gos Olímpicos. Y ese día dije, ‘esta
es una señal’”, relató Rodríguez.