Esta fotografía muestra pantallas que muestran el logotipo de la empresa de tecnología de ciberseguridad "CrowdStrike" en París el 19 de julio de 2024, en medio de una interrupción masiva de TI a nivel mundial.AFP
AGENCIA APFráncfort, Alemania
Un apagón tecnológico
mundial causado por una fallida actualización de software suspendió vuelos,
desconectó bancos y medios de comunicación y causó interrupciones en
hospitales, pequeñas empresas y otros servicios el viernes, poniendo de
manifiesto la fragilidad de un mundo digitalizado que depende sólo de un puñado
de proveedores.
El problema con la actualización emitida por la
empresa de ciberseguridad CrowdStrike y que afectaba a las computadoras con
Microsoft Windows no era un incidente de hackeo o un ciberataque, según
CrowdStrike, que se disculpó y dijo que una solución estaba en marcha.
Pero horas más tarde, las
interrupciones continuaron —y se intensificaron.
Había largas filas en los aeropuertos de Estados
Unidos, Europa y Asia, mientras las aerolíneas perdían el acceso a los
servicios de registro y reservas en un momento en que muchos viajeros se van de
vacaciones de verano. Hospitales y consultorios médicos tuvieron problemas con
sus sistemas de citas y cancelaron cirugías no urgentes. Varias cadenas de
televisión estadounidenses tampoco pudieron emitir las noticias locales a
primera hora del viernes.
“Vamos de camino a París
para los Juegos Olímpicos y ahora estamos varados aquí por el momento”, comentó
Oettinghaus.
Otros atletas y
asistentes que se dirigían a París sufrieron retrasos, al igual que sus
uniformes y acreditaciones, pero los organizadores de los Juegos Olímpicos
dijeron que las interrupciones fueron limitadas y no afectaron a la venta de
boletos ni al relevo de la antorcha.
UN INQUIETANTE RECORDATORIO DE VULNERABILIDAD
“Es un ejemplo muy, muy
incómodo de la fragilidad de la infraestructura central de internet”, señaló
Ciaran Martin, profesor de la Escuela de Gobierno Blavatnik de la Universidad
de Oxford y exdirector del Centro Nacional de Ciberseguridad británico.
James Bore, experto en
ciberseguridad, afirmó que la interrupción causará daños reales, ya que los
sistemas en que la gente confía en momentos críticos no estarán disponibles.
Los hospitales, por ejemplo, tendrán problemas para concertar citas, y quienes
necesiten atención no la recibirán, lo que provocará muertes.
“Todos estos sistemas
funcionan con el mismo software”, explicó Bore. “Hemos generalizado tanto todas
estas herramientas que cuando las cosas inevitablemente van mal —y lo harán,
como hemos visto-, van mal a gran escala”.
La directora de la agencia
alemana de seguridad informática, Claudia Plattner, afirmó que “los problemas
durarán algún tiempo; no podemos esperar una solución muy rápida”. Es difícil
pronosticar cuándo estarán exactamente todos los sistemas operativos, pero “no
serán horas”, añadió.
Frank X. Shaw, portavoz de
Microsoft, confirmó en un comunicado enviado por correo electrónico que “una
actualización de CrowdStrike fue la responsable de la caída de varios sistemas
Windows en todo el mundo”. Anteriormente, la compañía había publicado en la red
social X que estaba trabajando para “aliviar el impacto” y que estaban
“observando una tendencia positiva en la disponibilidad del servicio”.
EMISORAS SE QUEDAN SIN SEÑAL Y CIRUGÍAS SON POSTERGADAS
Mientras tanto, gobiernos y
compañías de todo el mundo tenían problemas para responder al problema.
La Casa Blanca dijo que el presidente
Joe Biden fue informado sobre el apagón y que su equipo está en contacto con la
compañía y con otros servicios afectados.
El primer ministro interino
de Nueva Zelanda, David Seymour, publicó en X que funcionarios del país se
estaban “movilizando para entender los posibles impactos” y añadió que no tenía
información que indicara que existía una amenaza de ciberseguridad.
El problema estaba causando
“inconveniencias” para el público y las empresas, añadió.
En la bolsa de Milán, el
índice FTSE MIB de valores italianos de primera fila no pudo recopilarse
durante una hora, aunque la negociación continuó.
Los grandes retrasos
registrados en los aeropuertos aumentaron el viernes por la mañana,
atribuyéndose la mayoría a problemas en los sistemas de reservas de las
distintas compañías aéreas.
En Estados Unidos, las
aerolíneas United, American y Delta dijeron que al menos algunos vuelos se
estaban reanudando tras graves interrupciones, aunque persistirían los retrasos.
Las líneas aéreas y
ferroviarias del Reino Unido también se vieron afectadas, con tiempos de espera
más largos de lo habitual.
AUSTRALIA SE VIO PARTICULAR ANTE AFECTADO POR LOS APAGONES
Aunque las interrupciones
se estaban produciendo en todo el mundo, Australia parecía estar gravemente
afectada por el problema. Las interrupciones notificadas por el sitio
DownDetector afectaron a los bancos NAB, Commonwealth y Bendigo, y a las
compañías aéreas Virgin Australia y Qantas, así como a proveedores de internet
y telefonía como Telstra.
Los medios de comunicación
nacionales —entre ellos la cadena pública ABC y Sky News Australia— no pudieron
transmitir en sus canales de televisión y radio durante horas. Algunos
presentadores de noticias salieron al aire en línea desde oficinas a oscuras,
frente a ordenadores que mostraban “pantallas azules de la muerte”.