ARCHIVO - Justin Jefferson, wide receiver de
los Vikings de Minnesota, lleva el balón en contra de los Lions de Detroit
durante la primera mitad del juego de la NFL, el 7 de enero de 2024, en
Detroit. Los Vikings y Jefferson pactaron una extensión de contrato por cuatro
años, el más rico para un jugador que no es QB. (AP Foto/Duane Burleson, Archivo)
(Duane Burleson / Associated Press)
MINNEAPOLIS —
Justin Jefferson se
convirtió en el último jugador en sacar provecho de la necesidad de receptores
de élite.
Coincidiendo con el
histórico inicio de su carrera, Jefferson cobrará, por el momento, como nadie
más en su posición.
Los Vikings de Minnesota y
su wide receiver superestrella pactaron el lunes una extensión de contrato por
cuatro años, el contrato más rico en la historia de la NFL para un jugador que
no es quarterback.
Jefferson recibirá 110 millones de dólares
garantizados, en un acuerdo que alcanza un valor de hasta 140 millones, con más
de 88 millones que serán entregados al momento de la firma.
“No nos detendremos aquí”, publicó Jefferson en
Instagram junto con un paquete de videos de momentos destacados y
agradecimientos en honor al contrato. “Hay más por hacer”.
Jefferson, quien tiene la mayor cantidad de yardas en
la historia de la liga para un jugador en sus primeras cuatro temporadas,
hubiera entrado al último año de su contrato de novato. Ambas partes estuvieron
“increíblemente cerca” de una extensión el verano pasado, dijo hace semanas el
gerente general, Kwesi Adofo-Mensah.
El promedio de 35 millones de dólares por año en el
nuevo contrato, supera al de Nick Bosa, defensive end de San Francisco (34
millones), cuya extensión firmada previo a la temporada pasada fue negociado
por la misma agencia, William Morris Endeavor, que también representa a
Jefferson.