(Abbie Parr / Associated Press)
MINNEAPOLIS —
Los Timberwolves de
Minnesota tienen firmado a todo su núcleo para la próxima temporada y más allá,
ostentando a dos jugadores estelares y a múltiples ganadores de premios en este
sensacional viaje a las finales de la Conferencia del Oeste.
Mantener la continuidad a
la que aspiran conlleva un costo.
Los Timberwolves – cargando
mega contratos para Anthony Edwards, Karl-Anthony Towns y Rudy Gobert – están
en camino a superar la segunda plataforma del impuesto de lujo, una cifra aun
por determinar que rebasa el tope salarial que se ha convertido más punible con
el nuevo contato colectivo de trabajo de la NBA.
“Frecuentemente, la mesa de
los últimos cuatro viene con un precio distinto que el de los equipos que no
están jugando en estas instancias de la temporada”, dijo el presidente de
operaciones de baloncesto, Tim Connelly, luego de la eliminación del equipo de
los playoffs en la noche anterior. “Estar donde estamos, implicará llevar
cierto control, y creo que según todas las cuentas, los propietarios no nos han
dado ninguna indicación de que seremos más agresivos y tratar de superar un
obstáculo adicional”.
Aprobando una tarifa en impuestos que podría
aproximarse a 50 millones de dólares, está lejos de ser simple negociación de
verano, considerando el estado de cambio en torno a la propiedad de la
franquicia, con la venta suspendida de Glen Taylor a Marc Lore y Alex Rodríguez
enviada a arbitraje. Pero Connelly dijo que confía en que la plantilla no se
verá afectada.
“Los propietarios han apoyado de manera increíble.
Pase lo que pase será como subir de nivel. Confío en que sea lo que suceda,
será en el camino correcto”, dijo Connelly.
Connelly, quien fue contratado hace dos años luego de
construir un eventual equipo ganador de título en Denver, tiene una opción de
salida de su contrato durante esta temporada baja. Presumiblemente eso le
traerá un aumento en Minnesota, no en otro sitio.
Los Wolves han tenido el segundo mejor récord de
temporada regular en la historia de la franquicia (56-26), superado por el
equipo de la campaña 2003-04 con 58-24, ese ha sido el único, a diferencia de
muchos, en avanzar de la primera ronda de playoffs. Ellos frustraron a las
estrellas de Phoenix Devin Booker y Kevin Durant en una barrida de primera
ronda, vencieron a los campeones defensores Nuggets y su tres veces Jugador Más
Valioso Nikola Jokic con una remontada en el séptimo juego en Denver y tuvieron
ventaja de casa ante Dallas antes de colisionar aparatosamente ante los
estelares Luka Doncic y Kyrie Irving.
“Mirando hacia atrás, quizás nos golpeamos contra una
pared”, dijo el suplente clave Kyle Anderson. “Se sintió como si no tuviéramos
el mismo jugo que tuvimos en las series ante Denver y Phoenix, y algunas veces
ni nos damos cuenta”.
Towns ingresará más de 49 millones de dólares el
próximo año, su décimo en la liga. Si la junta directiva tendría en mente
reducir salario, él sería un obvio candidato a ser traspasado considerando que
tiene apenas 28 años y cuenta con la clase de capacidad ofensiva que cualquier
equipo desearía en un jugador portentoso.
Towns hizo avances claros como jugador de
postemporada, pero su trabajo general esta primavera también dejó mucho margen
de mejora. Tanto Connelly como Finch dijeron inequívocamente que creen que
Towns es lo suficientemente bueno como para ser la mancuerna estelar de Edwards
dentro de un equipo campeón.
TRABAJANDO MÁS FUERTE
Edwards, quien jugará con los Estados Unidos en los
Juegos Olímpicos, reconoció que existe otro nivel de dedicación en temporada
baja al que podría alcanzar.
Los Timberwolves deben establecer más consistencia en
su ofensiva si desean volver a las finales de conferencia, y hasta disputar un
título. Eso comienza con ser más eficientes en los rompimientos.