Jaylen Brown (izquierda) de los Celtics de Boston celebra con Al Horford durante el primer partido de las Finales de la NBA contra los Mavericks de Dallas, el jueves 6 de junio de 2024, en Boston.
(Charles Krupa / Associated Press)
BOSTON —
Cuando los Celtics de
Boston anotan un aluvión de triples, no hay salida y probablemente van a ganar.
Los Mavericks de Dallas lo
entendieron antes del primer partido de las Finales de la NBA, y si alguien no
estaban al tanto, quedó en evidencia tras el duelo.
Los Celtics encestaron 16
triples, superando a los Mavericks por 27 puntos desde la larga distancia, en
su victoria por 107-89 el jueves por la noche. El viernes es un día libre, y
los equipos reanudarán prácticas el sábado. El segundo encuentro será el
domingo por la noche en Boston.
“Tenemos que ser mejores”, dijo el entrenador de los
Mavericks Jason Kidd. “No podemos usar como excusa los nervios”.
Buscarán hacer un mejor trabajo en los triples, ya sea
haciendo más, cediendo menos, o ambos.
“Creo que son el mejor equipo de tiros de tres puntos
de la NBA”, señaló el escolta de Dallas Luka Doncic.
Boston ganaba por 29 puntos en la primera mitad, luego
Dallas redujo el margen a ocho en el tercer cuarto. Parecía un juego cerrado
hasta que los Celtics comenzaron a anotar triples nuevamente. Tatum, Al Horford
y Jaylen Brown lograron separarse por 22 rápidamente.
Después de eso el partido no volvió a estar en duda.
“Me gustó cómo respondió nuestro equipo. Mantuvimos la
compostura y pudimos recuperar esa ventaja”, dijo Brown.
Los Mavericks terminaron con nueve asistencias, cinco
menos que en cualquier otro partido esta temporada. Doncic tiene 27 partidos
esta temporada con un triple-doble de puntos, rebotes y asistencias, pero todo
el equipo no logró un solo triple-doble en el primer juegos.
Boston por lo pronto continua con su misma fórmula
durante toda la temporada: muchos triples por un lado, mucha defensa por el
otro. Y en el primer partido, funcionó de maravilla.