Esta foto, proporcionada por las Fuerzas
Armadas de Filipinas, muestra a personal de la marina filipina recogiendo
restos de paquetes de comida que flotaban en los mares del atolón Second Thomas
Shoal, el domingo 19 de mayo de 2024. (Fuerzas Armadas de Filipinas vÃa AP)
(Armed Forces of the Philippines / Associated Press)
MANILA,
Filipinas —
El jefe militar filipino
dijo el martes que la guardia costera china incautó uno de los cuatro paquetes
de alimentos lanzados por un avión para el personal de la armada filipina en un
puesto de avanzada territorial que ha sido rodeado por buques chinos en las
disputadas aguas del Mar de la China Meridional.
El general Romeo Brawner
declaró que el personal chino podrÃa haber sospechado que los paquetes contenÃan
materiales de construcción destinados a reforzar un oxidado buque de la marina
filipina encallado en el atolón Second Thomas Shoal para
que sirviera de puesto de avanzada para las fuerzas filipinas. Tras descubrir
que el paquete contenÃa alimentos, arrojaron los artÃculos, entre los que habÃa
arroz y galletas, al mar, explicó Brawner.
Las autoridades chinas no
comentaron de inmediato las declaraciones de Brawner, pero han afirmado en
repetidas ocasiones que el atolón donde el ejército filipino encalló
deliberadamente el buque en 1999 pertenece a China, por lo cual han exigido que
sea remolcado. Las operaciones de reabastecimiento de las fuerzas filipinas en
el barco encallado han provocado escaramuzas y colisiones con barcos
guardacostas chinos que han dañado los barcos de abastecimiento filipinos y
herido a varios miembros de la armada filipina.
Los lanzamientos aéreos del 19 de mayo en el atolón
Second Thomas Shoal por parte del ejército filipino desencadenaron una carrera
entre los guardacostas chinos y el personal de la marina filipina a bordo de
pequeñas lanchas motoras para recuperar los cuatro paquetes. Los filipinos
consiguieron recuperar tres de los paquetes flotantes y los chinos se hicieron
con uno, declaró Brawner a los medios de comunicación en conferencia de prensa.
Después de que el personal chino se deshiciera de los
alimentos, los marineros filipinos consiguieron recuperar algunos en el mar,
pero el arroz se habÃa empapado y ya no era comestible, explicó.
“Confiscar nuestros suministros es ilegal”, declaró
Brawner. “No tienen derecho a llevarse nuestras provisiones, que en realidad
son alimentos y algunas medicinas”.