Ana Karina
Ramos, izquierda, la joven agredida por un guardia de seguridad y encontrada en
Pedro Brand al borde de la muerte, esta estable y en franca recuperación
“Estable y en franca recuperación”
es la situación al día de hoy de Ana Karina Ramos, la joven de 27
años encontrada agonizando en un lugar baldío de Pedro Brand con
múltiples heridas.
Según el director del hospital
Vinicio Calventi, José Alfaro, de continuar mejorando, a la joven se le
daría el alta médica la próxima semana.
“Si sigue así, sí es
posible. Ya sus heridas están
curando, le quedan unas fracturas, pero eso toma tiempo en recuperarse. De la
gravedad que llegó está en franca recuperación”,
manifestó Alfaro al ser
contactado por .
La víctima llegó al
hospital con una lesión a nivel del tórax posterior producto de la herida con
el arma tipo perdigón así como con múltiples heridas de arma
blanca en el cráneo, la frente, glúteos y el brazo, las cuales estuvieron en
contacto con la tierra durante los tres días que estuvo agonizando, lo que le
provocó una infección por miasis (gusanos).
En torno a esta infección
el doctor afirmó que está totalmente controlada y “que pueden
que aparezcan algunos (gusanos), pero ya todo está totalmente limpio”.
¿QUÉ LA LLEVO A ESTA SITUACIÓN?
El Ministerio
Público detalló en el documento de solicitud de medida de
coerción en contra de Eduardo Antonio Guerra García, de
41 años, cómo sucedieron los hechos que dejaron casi al borde de la muerte a Ana
Karina Ramos Corniel, de 27 años, en el municipio de Pedro Brand,
en Santo Domingo.
En el expediente los
fiscales indicaron que el 10 de junio, siendo 1:00 de la madrugada, Guerra
García se encontraba realizando funciones de vigilancia en una
fibra óptica de la empresa Claro, en el kilómetro 32 de la Autopista Duarte.
Justo en ese momento, según
el documento, iba pasando por el lugar la víctima y él la llamó y le preguntó
que “cuánto cobra por sus servicios sexuales”, a lo que ella le
respondió “la suma de RD$1,500”.
Los fiscales explicaron que
luego de conversar, ambos se dirigieron a una casa y en el sótano,
que era el lugar que utilizaba el imputado para dormir, procedieron a tener
relaciones sexuales. Posteriormente, Guerra García le reclamó a Ana Karina
por la suma de RD$20,000 que tenía guardado.
“Esto fue el detonante para que el imputado le diera un disparo en el costado izquierdo con una escopeta marca EGE, cal 12, Serie 55344, que tenía asignada para realizar las funciones de seguridad, además, le propinó múltiples heridas con un arma blanca en diferentes partes del cuerpo”, indicó el Ministerio Público. Por Jessica Arno, Listín Diario