El ucraniano Oleksandr Usyk propina un golpe
al británico Tyson Fury, durante su pelea por la unificación del título de los
pesados, la madrugada del domingo 19 de mayo de 2024, en Riad (Nick Potts/PA
via AP)
(Nick Potts / Associated Press)
RIAD —
Oleksandr Usyk derrotó el
sábado por decisión dividida a Tyson Fury para convertirse en el primer campeón
indiscutible de los pesados en 24 años.
Usyk (22-0) añadió el
título del CMB que poseía Fury a su colección de cinturones de la AMB, la FIB y
la OMB, por medio de un ataque espectacular en los últimos episodios, coronado
por un derribo en el noveno.
La pelea entre dos monarcas
de los pesados previamente invictos fue de toma y daca. Dos jueces favorecieron
a Usyk por 115-112 y 114-113, mientras que el tercero vio ganador a Fury, por
114-113.
“Es un gran momento. Es un gran día”, afirmó Usyk.
El ucraniano comenzó acelerado, pero tuvo que
sobrevivir a los asaltos intermedios, dominados por Fury, el púgil carismático
y confiado. Usyk remontó en los últimos capítulos, tal como ha hecho tantas
veces en su carrera.
Tomó el control con un dominante octavo asalto y
estuvo a punto de noquear al británico en el noveno.
El excampeón olímpico lastimó a Fury (34-1-1) por
medio de un zurdazo, y lo envió tambaleante hacia una esquina, donde el
británico quedó recargado contra un poste. Se acreditó un derribo justo antes
de que Fury fuera salvado por la campana.
Y el derribo resultó decisivo en el fallo de los
jueces.
“Muchas gracias a mi equipo”, dijo Usyk, quien trató
de contener las lágrimas en el cuadrilátero. “Es una gran oportunidad para mí,
para mi familia y para mi país. ¡Viva Ucrania!”.
Tras el campanazo final, Fury besó a Usyk en la
cabeza. Los dos púgiles disputarán muy probablemente una revancha en Arabia
Saudí en octubre.
El último boxeador que había acaparado todos los
cetros de los pesados era Lennox Lewis, quien ostentó esa condición durante
cinco meses en 1999 y 2000.