El base de los Mavericks de Dallas Kyrie Irving avanza hacia la canasta en el juego 1 de las finales de la Conferencia Oeste ante los Timberwolves de Minnesota el miércoles 22 de mayo del 2024. (AP Foto/Matt Krohn)
(Matt Krohn / Associated Press)
MINNEAPOLIS —
Kyrie Irving inyectó una
dosis de energía a los Mavericks de Dallas al ponerse en marcha la final de la
Conferencia Oeste con un furioso aluvión de tiros hacia la canasta en el primer
duelo ante los Timberwolves de Minnesota.
En la segunda mitad, cuando
comenzó a errar sus disparos, surgió una versión madura y refrescada de Irving,
que ha encendido a Luka Doncic. Los Mavs se valieron de una labor de equipo
para ganar el duelo.
Irving tiene un campeonato
de la NBA y 87 juegos de postemporada en su currículum, y ha dado un toque de
experiencia que nadie ha podido igualar en los playoffs.
“He estado en lo alto de la montaña. He tenido éxito,
pero también he fallado. Entonces veo este momento como una oportunidad de ayudar
a los chicos a asentarse y que estén conscientes de lo que se necesita para
estar aquí”, aseguró Irving.
La primera selección del draft 2011 disputó tres
finales consecutivas con los Cavaliers de Cleveland entre el 2015 y 2017, pero
en ese entonces el equipo se apoyaba en su máxima figura LeBron James. Irving
tenía 24 años en 2016, cuando los Cavs ganaron el título. Desde entonces, las
controversias, lesiones y canjes comenzaron a pintar un nuevo lienzo, pero con
cada victoria en los playoffs con los Mavericks esa pintura comienza a
desvanecerse.
“Es un nuevo capítulo de mi vida. Era un joven, pero
creo que ahora, con 32 años, superé esa montaña y he aprendido que el
baloncesto es el deporte que debía jugar”, añadió. “Para hacer eso tengo que
ayudar a los otros chicos a ser mejores. No puedo estar ahí anotando y
preocupándome de mí mismo”.
“He estado aquí antes, entonces aporto un poco más de
actitud de mi parte y de iniciar el juego con confianza y agresividad”, dijo
Irving, quien también contribuyó al esfuerzo de equipo para repeler a Anthony
Edwards, limitado a sólo 19 unidades y cuatro intentos de tres.
Edwards y los bases de los Wolves Mike Conley y
Nickeil Alexander-Walker atinaron nueve de 29 intentos, incluyendo 6 de 26
triples. Además, 49 de sus 89 tiros fueron desde la línea de tres, el máximo
del equipo en toda la temporada.
La ventaja de 62-38 de los Mavs en la pintura
seguramente les molesta.
“Somo el mejor equipo defensivo de la liga, entonces
la cantidad de puntos que permitimos, 108, es demasiado para este equipo”,
aseguró el suplente Naz Reid. “Creo que no hicimos nuestro trabajo defensivo”.