Mathieu van der Poel celebra tras ganar la
clásica París-Roubaix, el domingo 7 de abril de 2024. (AP Foto/Christophe Ena)
(Christophe Ena / Associated Press)
PARÍS —
PARÍS (AP) — El astro
holandés Mathieu Van der Poel se despegó a 60 kilómetros (37 millas) de la meta
para llevarse el domingo la victoria en la clásica París-Roubaix por segundo
año consecutivo.
Con su acérrimo rival Wout
van Aert recuperándose de múltiples lesiones sufridas en la carrera A Través de
Flandes a fines del mes pasado, Van der Poel dominó en el durísimo trayecto de
260 kilómetros (161 millas) que largó en Compiègne para llegar a Roubaix en el
norte de Francia.
Cuando atacó a 60
kilómetros de la meta, sus rivales simplemente no tuvieron fuerzas para
seguirle en un día seco, lo cual hizo menos traicionero el pedaleo en las 29
secciones con adoquines.
Al ingresar al Velodrome en Roubaix, el campeón mundial de
ruta había sacado tres minutos de ventaja y pudo disfrutar de la adulación del
público.
“Nunca me imaginé esto de niño. No tengo palabras, nada más
quiero disfrutar este momento”, dijo Van der Poel. “Me sentí muy fuerte de
piernas”.
Alzó los brazos al cruzar la meta tras emplear un tiempo de 5
horas, 25 minutos y 58 segundos.
El belga Jasper Philipsen — su compañero en el equipo
Alpecin–Deceuninck — quedó segundo tras superar al danés Mads Pedersen en un
sprint a la meta. Llegaron con un retraso de tres minutos.
La Paris-Roubaix es uno de los cinco “monumentos” en las
clásicas de un día. Las otras son el Tour de Flandes, la Lieja–Bastoña–Lieja,
el Tour de Lombardía y la Milán-San Remo.