El cruce
de Erez, por el cual se accede directamente al norte de Gaza desde Israel, se
mantiene cerrado, contrariamente a lo que Tel Aviv anunció hace cuatro días.
Los convoyes con comida que deberían ir sobre todo al norte, donde el 70% de la
población enfrenta condiciones de hambruna, son denegados tres veces más que
cualquier otro convoy humanitario con otros materiales.
La Oficina de Coordinacion
de Asuntos Humanitarios ha confirmado que el cruce de Erez, por el cual se
accede directamente al norte de Gaza desde Israel, se mantiene cerrado,
contrariamente a lo que Israel prometió hace cuatro días y, además, continúan
las restricciones para llevar ayuda desde el sur.
El paso de Erez y el puerto
de Asdot siguen sin estar operativos, a pesar de lo anunciado. Por el momento,
Israel solo permite el paso de camiones por Rafah y, en menor medida, por Kerem
Shalom, ambos en el sur.
El portavoz de la Oficina
de Coordinación Humanitaria explicó por qué difieren las cifras de
entrada de camiones de las que informa el Gobierno israelí de las que maneja la
ONU.
Israel cuenta los camiones
que inspecciona y deja entrar y la ONU cuenta los que llegan a sus almacenes.
Entre estos dos pasos, dijo, “hay problemas”. En primer lugar, los
camiones que entran están a mitad de carga, un requisito que ha impuesto Israel.
Después, obligan a los
conductores egipcios a descargarlos y a marcharse antes de que los camiones y
conductores palestinos puedan recoger la carga, algo que a menudo no ocurre
hasta el día siguiente y que impide comparar cifras día a día. Los camiones de
la ONU se cargan y contabilizan con carga completa.
Una vez
superados los obstáculos para llegar a los almacenes, están los impedimentos
para distribuir la ayuda.
“Los convoyes con comida
que deberían ir sobre todo al norte, donde el 70% de la población enfrenta
condiciones de hambruna, son denegados tres veces más que cualquier otro convoy
humanitario con otros materiales. Esto es bastante asombroso, ¿no es cierto?,
dijo Jens Laerke, añadiendo que Israel no ofrece ninguna explicación.
En marzo, en las áreas que
requieren coordinación, Israel solo autorizó un 26% de las misiones para llevar
comida. Denegaron o impidieron el paso de 420 camiones con alimentos.
Laerke recordó que Israel,
como potencia ocupante, está obligado a facilitar el paso de la ayuda.
Por su parte, expertos de
la ONU en derechos humanos han denunciado que Israel convierte los
alimentos en arma contra Gaza, continuando un genocidio iniciado hace años. El
uso del arma como arma es considerado un crimen de guerra.
Alemania niega
ser cómplice de genocidio
Alemania ha “rechazado
firmemente” las acusaciones de Nicaragua de que el apoyo militar que presta a
Israel le haga cómplice de un posible genocidio en Gaza.
El equipo legal que
representa al Gobierno germano ante la Corte Internacional de Justicia recalcó
que Alemania tiene, a raíz del Holocausto, “una responsabilidad especial
hacia Israel” y que “la existencia de Israel es un asunto de Estado”
para ellos.
“Alemania solo proporciona
armas con un detallado escrutinio que no solo respeta, sino que excede los
requisitos de la legislación internacional. Las exportaciones de armas tienen
en cuenta las amenazas de seguridad que enfrenta Israel, sobre todo
inmediatamente después del 7 de octubre”, sostuvo Tania von Uslar-Gleichen, que
encabeza el equipo legal alemán.
Además añadió que Alemania
apoya los derechos del pueblo palestino, reconoce su derecho de
autodeterminación en los territorios ocupados desde 1967 y está comprometido
con la solución de los dos Estados.
Nicaragua ha
pedido a los jueces de la ONU que dicten medidas cautelares que frenen la
entrega de armamento alemán porque
considera que incumple las obligaciones contraídas por la Convención para la
Prevención y Sanción del Genocidio (1948).
Hace diez días, la Corte
dictó por segunda vez medidas provisionales contra Israel para evitar un
genocidio, mientras seguía empeorando la situación humanitaria en la Gaza
bombardeada y asediada.
La relatora especial*
sobre la situación de los derechos humanos en los Territorios Palestinos
Ocupados, Francesca Albanese, ha acusado a Israel de estar cometiendo un
genocidio en Gaza.
Más de 33.000 palestinos
han muerto en la guerra en Gaza, la mayoría de ellos mujeres y los niños.