ARCHIVO - Catalina, la princesa de Gales,
sonríe durante su visita a Sebby’s Corner, en el norte de Londres, el viernes
24 de noviembre de 2023. La princesa se disculpó el lunes 11 de marzo de 2024
por la “confusión” causada por su edición a una foto familiar publicada por el
palacio, una imagen que pretendía calmar la preocupación y las especulaciones
sobre la salud de la princesa, pero tuvo el efecto contrario. (Foto AP/Frank Augstein, Pool, archivo)
(Frank Augstein / Associated Press)
LONDRES —
Catalina, la princesa de
Gales, se disculpó por la “confusión” causada por su edición a una foto
familiar publicada por el palacio, una imagen de Catalina y sus hijos que
pretendía calmar la preocupación y las especulaciones sobre la salud de la
integrante de la familia real británica, pero que tuvo el efecto contrario.
Varias agencias de noticias
que publicaron inicialmente la foto, incluida The Associated Press, retiraron
la imagen por dudas sobre la manipulación digital. La fotografía divulgada por
la oficina de la pareja en el Palacio de Kensington el domingo para conmemorar
el Día de la Madre en Gran Bretaña, era la primera fotografía oficial de
Catalina, de 42 años, desde que se sometió a una cirugía abdominal hace casi
dos meses.
Las retractaciones hicieron
que los rumores en internet, ya de por sí desenfrenados por operación y
recuperación de Catalina, se multiplicaran. El desastre de relaciones públicas
es una prueba más de que el mantra de larga data de la familia real de “nunca
te quejes, nunca expliques” es imposible en una era saturada de redes sociales.
En una publicación en redes sociales, Catalina dijo el
lunes que “como muchos fotógrafos aficionados, ocasionalmente experimento con
la edición”.
“Quería expresar mis disculpas por cualquier confusión
causada por la fotografía familiar que compartimos ayer”, agregó.
En el pasado, el palacio ha publicado varias de las
instantáneas familiares tomadas por Catalina, en las que aparecen ella y su
esposo, el príncipe heredero Guillermo, con sus hijos, el príncipe Jorge, de 10
años, la princesa Carlota, de 8, y el príncipe Luis, de 5.
Si bien no había indicios de que la fotografía fuera
falsa, AP se retractó de su publicación porque una inspección más detallada
reveló que la fuente había manipulado la imagen de una manera que no cumplía
con los estándares fotográficos de la organización noticiosa. Por ejemplo,
contenía una inconsistencia en la alineación de la mano izquierda de la
princesa Carlota con la manga de su suéter.
Otras agencias de noticias importantes, incluidas
Getty, Reuters, AFP y la agencia nacional del Reino Unido, PA, también
retiraron la fotografía.
El ex corresponsal de la BBC especializado en realeza,
Peter Hunt, dijo que la publicación de fotografías mal manejada “es perjudicial
para la realeza”.
“Sabían que habría un gran interés por cualquier foto
que publicaran de Catalina”, escribió en X, antes conocido como Twitter. “Su
desafío es que las personas ahora se preguntarán si se puede confiar en ellos y
creerles la próxima vez que publiquen una actualización sobre su estado de
salud”.
La relativa franqueza de Carlos sobre su diagnóstico
fue un nuevo punto de partida para la familia real, generalmente reservada.
Pero se ha visto eclipsado por el interés popular sobre Catalina. Ante la falta
de información clara, las teorías de la conspiración se han apresurado a llenar
el vacío.
La publicación de la foto del Día de las Madres siguió
a semanas de chismes en redes sociales sobre lo que le había sucedido a Catalina
desde que salió de un hospital el 29 de enero luego de dos semanas internada
por una cirugía planificada. La princesa no se había visto públicamente desde
Navidad.
El palacio dijo inicialmente que sólo se
proporcionarían actualizaciones significativas y qu la princesa no volvería a
los deberes reales antes de Pascua, el 31 de marzo de este año. Tras esto
publicó un comunicado el mes pasado diciendo que estaba bien.
Entonces, asesores reales dijeron al periódico The
Sun: “Hemos visto la locura de las redes sociales y eso no va a cambiar nuestra
estrategia. Ha habido mucho en las redes sociales, pero la princesa tiene
derecho a la privacidad y pide al público que lo respete”.
Corresponde a los funcionarios del palacio, no a los
departamentos gubernamentales, anunciar la asistencia de la realeza a los
eventos. El Palacio de Kensington no confirmó ningún evento público programado
para Catalina, y el ejército eliminó más tarde la referencia a su asistencia.
Guillermo, la reina Camila y otros miembros de la
realeza asistieron a una misa del Día de la Mancomunidad de Naciones en la Abadía
de Westminster el lunes. Ni Catalina ni el rey estuvieron en la misa, que
atrajo a decenas de manifestantes antimonárquicos con carteles que decían
“Abajo la corona”.
El consultor de relaciones públicas veterano Mark
Borkowski dijo que el tropezón de la foto expuso un problema de relaciones
públicas más amplio para la monarquía.
“No parece haber mucho pensamiento estratégico
conjunto en el seno de la familia real en este momento, lo que lleva a estos
problemas de una organización muy difícil de manejar en términos de relaciones
públicas”, dijo.