agencia efeSan Juan
El Gobierno de Jamaica aseguró
este viernes que quiere evitar "una avalancha" de haitianos en
su territorio y que únicamente acogerá a algunos refugiados puntuales como los
niños de un orfanato y personal del Banco Mundial.
El ministro jamaicano de Seguridad Nacional, Horace
Chang, explicó al Parlamento que la Administración de Andrew
Holness está revisando la situación y que cualquier iniciativa
"no permitiría que Jamaica se vea abrumada por una afluencia de
refugiados".
"Aceptaremos acoger legítimamente a un número de personas,
concretamente a los huérfanos de un orfanato que fue aislado", indicó
Chang, quien detalló que la ONG Comunidad Semilla de
Mostaza está haciendo las gestiones.
El titular
de Seguridad Nacional también detalló que el Banco Mundial ha pedido a Jamaica
traer a su personal de Haití a este país vecino y que están "trabajando en
el proceso para lograrlo".
"Lo que podemos hacer por medios legítimos, lo estamos
haciendo. Todavía tenemos que mantener el control sobre nuestras fronteras
porque no podemos permitirnos una avalancha de refugiados", aseveró.
Chang adelantó que se irán revisando todas estas cuestiones a
diario y que el Gobierno busca mejorar la seguridad fronteriza de Jamaica.
En los
últimos días, Jamaica ha recibido un par de embarcaciones con migrantes
haitianos, según el ministro, que no precisó el número de personas llegadas a
la isla.
Sobre estos dos grupos, Chang indicó que la política es
devolverlos a su país porque las áreas a las que regresarán están "relativamente tranquilas".
El ministro expresó asimismo su preocupación por la situación
en Haití y afirmó que el Gobierno está asumiendo "un
papel activo y de liderazgo" para tratar de lograr con socios
regionales e internacionales una solución a la crisis.
El Gobierno de Haití prorrogó el jueves el
estado de emergencia por un mes en el departamento del Oeste, donde se
encuentra la capital Puerto Príncipe, y prolongó el toque de queda otros cuatro
días.
Por su parte, el primer ministro haitiano, Ariel Henry, permanece varado en Puerto Rico, debido a que la escalada de la
violencia se dio cuando estaba fuera del país.
Henry está
bajo gran presión para que renuncie, pero, según anunció el miércoles la
Comunidad del Caribe (Caricom), no se ha podido alcanzar "ningún tipo de
consenso" entre las partes en conflicto en Haití.