El presidente de El
Salvador, Nayib Bukel, habla en la Conferencia de Acción Política Conservadora
(CPAC)ANNA MONEYMAKER/AFP
AGENCIA AFPSan Salvador, El
Salvador
La decisión del presidente salvadoreño Nayib Bukele de eliminar la "ideología de género" de libros y guías escolares amenaza con elevar la intolerancia y la violencia sexual en este país conservador, aseguran organizaciones de defensa de las mujeres y de la comunidad LGBTIQ+.
El Ministerio de Educación anunció esta semana que
retiró "todo rastro" de la perspectiva de género de los contenidos
escolares, en línea con decisiones similares adoptadas en Argentina por el
presidente ultraderechista Javier Milei, quien
prohibió el uso de lenguaje inclusivo en la administración nacional.
La decisión fue anunciada por el ministerio días después de que Bukele, recién reelecto, participara en un encuentro conservador en Estados Unidos, y fue saludada por grupos conservadores, pero criticada por entidades feministas y de derechos humanos.
"CONFIRMADO: todo uso o todo rastro de la
ideología de género lo hemos sacado de las escuelas públicas", escribió en
la red X el ministro de Educación, José Mauricio Pineda.
En la misma red el
ministerio publicó: "Aclaramos que todos estos contenidos han sido
expulsados de guías, libros y demás materiales educativos que fueron hechos y
difundidos por gestiones anteriores".
El diario La Prensa
Gráfica indicó este viernes que el Ministerio "amenaza" con despedir
a docentes "si se difunde 'ideología de género'".
Cuando era candidato
presidencial en 2019, Bukele se mostró abierto a discutir las demandas de la
comunidad LGTBIQ+ y organizaciones feministas, pero en la presidencia dejó
claro que no haría reformas en temas que son muy sensibles en un país muy
conservador, que tiene leyes draconianas contra el aborto.
El Salvador prohibió en
1998 el aborto sin excepciones, que se castiga con dos a ocho años de cárcel.
Pero a menudo es tipificado como "homicidio agravado", lo que
conlleva penas de 30 a 50 años de prisión.
"TENDENCIA REGIONAL"
La medida fue aplaudida por
la Alianza de Padres de Familia SV, que publicó en X: "Ministro [...] muy
buen comentario" y fustigó el "dañino adoctrinamiento de ideología de
género".
Sin embargo, organizaciones feministas alertaron que
la medida estimulará la "intolerancia".
"Esa decisión no ha
sido atinada, se cae en la violación del derecho de la igualdad pues se está
discriminando", dijo a la AFP Silvia Juárez, de la Organización de Mujeres
Salvadoreñas por la Paz, quien teme que genere "más intolerancia".
"Lo que permite la
educación integral en la sexualidad es que se reconozcan que hay otras
identidades, eso permite que no hayan violencias que hemos sufrido nosotras
cuando estuvimos en las edades escolares", declaró a la AFP Karla Guevara,
del Colectivo Alejandría, quien calificó la medida como una
"vulneración" de los derechos de la comunidad LGTBIQ+.
Para algunas oenegés esta
medida implica un retroceso, pues elimina una vía de prevención de la violencia
sexual.
"La realidad y la
dignidad de estas personas no desaparece porque se censuren palabras o se
prohíban contenidos en los currículos escolares", dijo a la AFP Marcela
Martino Aguilar, del Centro para la Justicia y el Derechos Internacional
(CEJIL).
"Quienes más se van a
ver afectados [...] son las niñas en riesgo de vivir violencia sexual [...] y
por supuesto las personas LGTBIQ+", indicó a la AFP Alejandra Coll, del
Centro de Derechos Reproductivos.
CÓNCLAVE EN EEUU
El mandatario de 42 años
debutó en política en 2012 como alcalde del partido de la antigua guerrilla
izquierdista, pero fue expulsado de sus filas en 2017.
En los comicios de 2019
Bukele acabó con el bipartidismo izquierda-derecha imperante en El Salvador
desde el fin de la guerra civil en 1992.
Su cruzada contra las
pandillas, lanzada en marzo de 2022, le ha valido adeptos en todo el
continente, pues provocó una caída radical de la violencia. Pero también
críticos, ya que a muchos acusados se les ha negado o aplazado la posibilidad
de un debido proceso.
Bukele y Milei participaron
en Estados Unidos la semana pasada en la Conferencia de Acción Política
Conservadora (CPAC). También asistió el expresidente estadounidense Donald
Trump, quien es favorito para ganar la candidatura republicana para las
elecciones de noviembre próximo.