El bateador designado de los Dodgers de Los Ángeles Shohei Ohtani reacciona tras conectar un jonrón en un juego de pretemporada ante los Medias Blancas de Chicago, el martes 27 de febrero de 2024, en Arizona. (AP Foto/Ashley Landis)
(Ashley Landis / Associated Press)
GLENDALE, Arizona,
EE.UU. —
Shohei Ohtani necesitó de
apenas tres turnos al bate en la pretemporada para demostrar lo que el pelotero
que costó 700 millones de dólares puede aportar a los Dodgers de Los Ángeles.
El astro japonés sacudió un
jonrón de dos carreras en su primer juego con el uniforme azulado de los
Dodgers el martes, cuando trabajó la cuenta completa en el quinto inning antes
de conectar por banda contraria ante Dominic Leone. El batazo superó con lo
justo el muro del jardín izquierdo.
“Definitivamente me sentí
bien en el plato, cada vez mejor”, comentó Ohtani. “Vamos en la dirección
correcta”.
Ohtani se había ido en blanco en sus dos primeros
turnos, ponchándose en cuatro lanzamientos en el primer inning y pegando luego
un rodado fuerte para doble play en el tercero.
Dos veces nombrado el Jugador Más Valioso, Ohtani
recibió una ovación de pie previo a su primer turno en el Camelback Ranch,
donde docenas de aficionados lucieron la franela con su número 17 y aplaudieron
con cada uno de sus pasos.
Los Dodgers, que ya eran unas de las franquicias más
emblemáticas de las Grandes Ligas, se han hecho más populares tras el gasto de
más de 1.000 millones de dólares para adquirir a Ohtani y al también lanzador
japonés Yoshinobu Yamamoto.
Se prevé que Yamamoto debute en la pretemporada este
miércoles.
El primer swing de Ohtani no fue exactamente algo
digno de recordar. Abanicó, mientras el casco se le caía.
Pero corrigió muy pronto ese mal momento y mostró el
poder que le ha permitido conectar 124 vuelacercas en las últimas tres
temporadas. La multitud rugió cuando el japonés hizo contacto con la pelota.
Y la aclamación se hizo más sonora cuando la pelota se
fue del otro lado de la barda.