Una barrera de alambre de púas y la valla fronteriza entre El Paso, Texas y Ciudad Juárez, visto desde Ciudad Juárez, México.CHRISTIAN CHAVEZ / AP
agencia efeWashington
El Tribunal
Supremo de Estados Unidos falló
este lunes a favor del Gobierno federal para que pueda retirar el alambre de
púas que las autoridades de Texas colocaron en un tramo de la
frontera con México para frenar a los migrantes.
Con cinco votos a favor y cuatro en contra, el alto
tribunal dio la razón a la Administración de Joe Biden, que denunció que la
barrera impedía a los agentes de la Patrulla Fronteriza acceder al área y
desempeñar sus funciones.
El gobernador de Texas,
el republicano Greg Abbott, ordenó
la colocación del alambre de espinas en un tramo de la frontera en Eagle Pass
como parte de su plan de reducir el cruce de migrantes en situación irregular.
Después de que agentes de la Patrulla Fronteriza
cortaran parte del alambre, el Gobierno de Texas demandó a la Administración
federal alegando que causaron daños en una propiedad estatal.
Un juez federal dio
primero la razón a la Administración de Biden, pero luego el Tribunal de
Apelaciones del Quinto Circuito se puso del lado de Texas, estableciendo que
los agentes federales solo podían mover la barrera en caso de una emergencia
médica.
El Tribunal Supremo
revocó este lunes la decisión de la corte de apelaciones, con una mayoría muy
ajustada.
Votaron a favor de la Administración de Biden, los jueces progresistas Sonia
Sotomayor, Elena Kagan y Ketanji Brown Jackson; y los conservadores John Roberts y Amy Barrett.
Los magistrados
conservadores Clarence Thomas, Samuel Alito, Neil Gorsuch y Brett Kavanaugh se
situaron del lado de Texas.
El gobernador texano ha
emprendido una batalla política, mediática y judicial contra Biden por la
gestión migratoria en la frontera.
Además de la colocación del alambre de púas, Abbott ha
enviado decenas de buses con migrantes a Washington y a varias otras ciudades
gobernadas por demócratas.
También instaló una
polémica barrera de boyas en un tramo del río Bravo que separa la frontera
entre Texas y México, e impulsó una ley para criminalizar a los migrantes que
cruzan de forma irregular la frontera, ambas medidas muy criticadas por el
presidente de México, Andrés Manuel
López Obrador.