La gente reacciona durante el desfile de la Epifanía "Cabalgata de Reyes" en Barcelona, España, el viernes 5 de enero de 2024AP
AGENCIA EFEMadrid
El frío que sacude a buena parte del país no impidió que miles de niños, siguiendo una tradición muy española, llenaran las calles y plazas para recibir a Sus Majestades de Oriente
Los Reyes Magos recorren este
viernes, como cada año, las calles de los pueblos y las ciudades de España en coloridas y festivas
cabalgatas que llevan ilusión y alegría a niños y mayores, a la espera de que
esta noche, la más mágica del año, los colmen de regalos.
Ya por la mañana, Melchor, Gaspar y Baltasar llegaron a las distintas ciudades, tanto por barco,
como en helicóptero, en tren, en funicular, e incluso en tirolina, y fueron
recibidos por cientos de niños, impacientes por saludarlos antes de la cabalgata de por la tarde.
El frío que sacude a buena parte del país no impidió que
miles de niños, siguiendo una tradición muy española, llenaran las calles y
plazas para recibir a Sus
Majestades de Oriente, que este año estuvieron acompañados por
danzantes, músicos, magos y personajes y animales de fantasía, que repartieron
miles de kilos de caramelos y todo tipo de golosinas.
En carrozas, a lomos de dromedarios o de caballos,
cualquier medio es válido para que los
Un hombre que representa a uno de los Reyes Magos camina dentro de un centro comercial antes del desfile de Epifanía "Cabalgata de Reyes" en Barcelona, España, el viernes 5 de enero de 2024.
La cabalgata más antigua de España es la de la
localidad alicantina de Alcoy (este), que se remonta a 1885 de forma
ininterrumpida, aunque la primera vez que se celebró fue en el año 1866, y
entre las más multitudinarias destacan las de Madrid, Barcelona o Sevilla, con
decenas de carrozas y miles de personas que participan en el festivo desfile.
Pero también los pueblos
más pequeños cuentan con la presencia de los Magos de Oriente, como el caso de Ibi en Alicante, una localidad
de tradición juguetera, que cuenta con cabalgata desde hace más de 90 años, y
donde Melchor, Gaspar y Baltasar tienen, incluso, una estatua en su honor; o en
la localidad onubense de Higuera de la Sierra (sur de España), que celebra esta
fiesta desde hace más de un siglo con una particularidad: sus protagonistas
permanecen inmóviles durante todo el recorrido y representan escenas de la
Biblia relacionadas con el nacimiento de Jesús.
Este año, además, los Reyes Magos han traspasado las fronteras españolas, y
desde la localidad salmantina de Fuentes de Oñoro (este) cruzaron hacia
Portugal y desfilaron por el pueblo luso de Vilar Formoso, a pesar de que no es
tradición en ese país; Melchor, Gaspar y Baltasar iban a lomos de sus
respectivos caballos, mientras los pajes viajaban en unas calesas portuguesas
de la localidad de Almeida.
Después de ver la
cabalgata, los niños y los padres dejan algo de comer para los Reyes Magos, e
incluso agua para los camellos, antes de irse a la cama y, con nervios, esperar
a la mañana del día 6 para ver los regalos que les han dejado.
Pese a que en España cada
vez está más asentada la figura de Papá
Noel y la mayoría de niños reciben regalos el día 25 de diciembre,
no se ha dejado a un lado a Melchor, Gaspar y Baltasar, que con su generosidad,
ponen el broche de oro a las fiestas de Navidad.