El
presidente electo Bernardo Arévalo denunció un intento de golpe de Estado.AGENCIAS/
AGENCIA AFPCiudad de Guatemala, Guatemala
El Tribunal Supremo Electoral de Guatemala (TSE) inhabilitó este jueves
al partido Semilla del presidente electo Bernardo Arévalo, al
acatar una orden dictada por un juez en agosto por supuestas irregularidades en
su inscripción.
El partido fue inhabilitado el 28 de agosto por el
Registro de Ciudadanos (padrón electoral) por orden judicial, lo que condujo a
Arévalo a denunciar un plan de "golpe de Estado" para impedir que
asuma el poder en enero de 2024. Sin embargo, el TSE levantó temporalmente la
inhabilitación el 3 de septiembre hasta que culminara formalmente el proceso de
elecciones, el 31 de octubre.
"Lo que ha hecho el Registro de Ciudadanos es dar
cumplimiento, en este caso, a la orden del juez, toda vez, que el proceso
electoral ya ha finalizado", dijo el vocero del TSE, Luis Gerardo Ramírez,
a periodistas.
Ramírez explicó que ahora Semilla tiene
prohibido realizar cualquier actividad.
La suspensión fue ordenada por el cuestionado juez Fredy
Orellana por pedido de la fiscalía, que emprendió una cruzada contra Semilla en
un aparente intento de impedir que Arévalo asuma el poder.
Sin embargo, el portavoz enfatizó que el TSE "ya validó
los resultados [de los comicios] y los oficializó", lo que implica que las
nuevas autoridades deberán asumir sus cargos el 14 de enero.
Arévalo es
hijo de un presidente que dejó huella en el país y su amplia victoria sobre la
candidata del continuismo, la ex primera dama Sandra Torres, es atribuida a que generó esperanzas de cambio con su
promesa de lucha frontal contra la corrupción, mal endémico en el país.
La cruzada contra Semilla fue lanzada por el cuestionado
fiscal Rafael Curruchiche luego de que Arévalo dio la sorpresa en la primera
vuelta electoral el 25 de junio y pasó al balotaje ante Torres.
Esta persecución ha provocado manifestaciones masivas y
bloqueos de rutas en el país por varios días para exigir la renuncia de la
fiscal general, Consuelo Porras, del fiscal Curruchiche y del juez Orellana.
Los tres
funcionarios judiciales figuran en una lista de Estados Unidos de actores
"corruptos".