Zósimo de Panópolis, Ge Hong, Paracelso, Fullmetal Alchemist. La alquimia es una antigua disciplina filosófica y protocientífica que buscaba incansablemente transformar metales en oro. Su práctica fue común en la Mesopotamia, Egipto, Persia, India, China, Grecia y, fundamentalmente, en el Imperio Islámico y en la Europa Medieval.
Así, como en una alquimia moderna, científicos argentinos lograron
convertir pelos de vaca -con un olor a pis nauseabundo- en baterías de litio. What!? Parece una
locura, pero es 100% real.
Contenido relacionado: De Donde Vienen las Empresas que Extraen Litio en Argentina
Partiendo del pelo de vaca –que es, formalmente, un residuo de curtiembre- se realiza un proceso de lavado casero y luego se lo lleva al laboratorio donde se procede con una parte, digamos, más química.
Primero se hace un lavado para eliminar todo aquello que pueda estar contaminando, se seca y posteriormente se hacen dos tratamientos térmicos (en ausencia de oxígeno) y una etapa de ‘activación’ en el medio, que llevan a obtener un material que fundamentalmente tiene carbono (biocarbón) y algo de oxígeno”, explica los pormenores técnicos la doctora en química Victoria Bracamonte, investigadora adjunta del CONICET y profesora asistente de la UNC (Universidad Nacional de Córdoba).