El expresidente de EEUU Donald Trump baila tras pronunciar un discurso en un mitin en Summerville, Carolina del Sur, el lunes 25 de septiembre de 2023. (Artie Walker Jr. / Associated Press)
NUEVA
YORK — Un juez falló el martes que
Donald Trump cometió fraude durante años mientras construía el imperio
inmobiliario que lo catapultó a la fama y a la Casa Blanca.
El juez Arthur Engoron, que se
pronunció sobre una demanda civil entablada por la fiscal general de Nueva
York, Letitia James, determinó que el expresidente y su empresa engañaron a
bancos, aseguradoras y otras entidades al sobrevalorar masivamente sus activos
y exagerar su patrimonio neto en la documentación utilizada para cerrar
acuerdos y obtener financiación.
Engoron ordenó que se
rescindieran algunas de las licencias comerciales de Trump como sanción, lo que
dificultaría o imposibilitaría que hiciera negocios en Nueva York, y dijo que
seguiría teniendo un monitor independiente supervisando las operaciones de la
Organización Trump.
Un portavoz de Trump no respondió por el momento a una
solicitud de comentarios sobre el fallo. Trump insiste desde hace tiempo en que
no hizo nada malo.
La decisión, anunciada días antes del inicio de un juicio
sin jurado en la demanda de la fiscal James, es el revés más contundente hasta
la fecha para la imagen de Trump como magnate inmobiliario.
Más allá de presumir de sus riquezas, Trump, su empresa y
sus principales ejecutivos mintieron repetidamente sobre ellas en sus estados
financieros anuales, con lo que obtuvieron recompensas tales como condiciones
de préstamo favorables y primas de seguro más bajas, según Engoron.
Esas tácticas cruzaron una línea y violaron la ley, aseveró
el juez, rechazando el argumento de Trump de que una cláusula de descargo de
responsabilidad en los estados financieros lo absolvía de cualquier delito.
“En el mundo de los aquí acusados: los apartamentos de
alquiler regulado valen lo mismo que los apartamentos no regulados; los
terrenos restringidos valen lo mismo que los terrenos no restringidos; las
restricciones pueden evaporarse en el aire; un descargo de responsabilidad de
una parte que atribuye la responsabilidad a otra exonera las mentiras de la
otra parte”, escribió Engoron en su fallo de 35 páginas. “Ese es un mundo de
fantasía, no el mundo real”.
La fiscalía de Manhattan había estudiado la posibilidad de
iniciar una causa penal por la misma conducta, pero se negó a hacerlo, dejando
a James la posibilidad de demandar a Trump y solicitar sanciones que podrían
afectar a su capacidad y la de su familia para hacer negocios en el estado.
El fallo de Engoron, en una fase del caso conocida como juicio
sumario, resuelve la principal acusación en la demanda de James, pero quedan
otras seis.
Engoron tiene previsto celebrar un juicio sin jurado a
partir del 2 de octubre antes de decidir sobre esas acusaciones y las sanciones
que pueda imponer. James ha pedido 250 millones de dólares en multas y la
prohibición de que Trump haga negocios en Nueva York, su estado natal. El
juicio podría durar hasta diciembre, ha dicho Engoron.