Europa Press
Madrid,
España
La ONU ha
alertado sobre el aumento récord de producción de cocaína, que se llegó a
disparar un 35 por ciento entre 2020 y 2021 tras una desaceleración durante la
etapa inicial de la pandemia del COVID-19, y lo achaca a la expansión del
cultivo de arbusto de coca y a las mejoras en el proceso de transformación de
la hoja en clorhidrato de cocaína.
Los puertos
de Países Bajos se están convirtiendo en el nuevo punto de entrada de cocaína a
Europa Occidental, que "han eclipsado" a España y Portugal, según el
informe publicado este jueves por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga
y el Delito (UNODC).
Colombia,
donde el vacío que han dejado las FARC ha sido ocupado por exguerrilleros y
grupos extranjeros, sigue dominando las rutas hacia América del Norte, no así
hacia Europa, cuyos envíos provienen mayoritariamente de países
centroamericanos.
Además, la
ONU ha advertido sobre el crecimiento del mercado de cocaína en África y Asia,
aunque ha admitido que aún no se ha llegado a los niveles de Europa y Norteamérica,
los principales consumidores de esta droga.
"La
potencial expansión del mercado de cocaína en África y Asia es una realidad
peligrosa. Insto a los gobiernos y a otras instancias a que examinen
detenidamente las conclusiones del informe para determinar cómo se puede hacer
frente a esta amenaza transnacional con respuestas transnacionales basadas en
la sensibilización, la prevención y la cooperación internacional y
regional", ha afirmado la directora ejecutiva de la Oficina de
Fiscalización de Drogas y de Prevención del Delito Ghada Waly.
Waly también
ha avisado de que los principales mercados de cocaína, donde su consumo
proporcional es elevado, cubren una quinta parte de la población mundial y que,
de igualarse en otras regiones, el número de consumidores aumentaría
"enormemente".
Los
traficantes han diversificado sus medios de distribución a través del correo
postal y los servicios de paquetería y mensajería, cuyo uso aumentó durante la
implementación de cuarentenas relacionadas con el COVID-19. Se ha encontrado
droga oculta en libros, imágenes religiosas e incluso piezas de repuesto de
vehículos.
También han
aumentado considerablemente las intercepciones de cargamentos de cocaína por
parte de las autoridades en todo el mundo, llegando a las 2.000 toneladas en
2021.
El informe
ha apuntado que países como España o Argentina han experimentado un descenso de
mulas de droga en vuelos de pasajeros a la par que han registrado grandes
envíos de equipajes no acompañados.
En países como Bélgica, Francia, España e Italia existe una tendencia al alza en torno al consumo de cocaína crack.