Anna
CUENCA
Londres,
Reino Unido | AFP
El
carismático y controvertido ex primer ministro británico Boris Johnson
despliega el miércoles sus conocidas dotes de supervivencia polÃtica en un
interrogatorio de alto riesgo para su futuro, ante una comisión que investiga
si mintió intencionadamente al parlamento sobre el "partygate".
"La evidencia que tenemos plantea serias preguntas y esta es la oportunidad para que
el señor Johnson ofrezca sus respuestas", afirmó la presidenta del comité
al abrir la sesión, televisada en directo.
El
conservador británico juró sobre la biblia decir "toda la verdad y nada
más que la verdad" y comenzó asegurando que si condujo a error a los
diputados, lo hizo inintencionadamente "en base a lo que honestamente
sabÃa y creÃa en ese momento".
En su defensa
escrita, publicada la vÃspera, argumentó que sus asesores le habÃan asegurado
que no se habÃa infringido ninguna norma durante las múltiples "reuniones
de trabajo" celebradas en sus oficinas del número 10 de Downing Street
durante los confinamientos contra el covid-19.
"Estaba
centrado en decisiones difÃciles relativas a la pandemia (asà como en otros
asuntos que el primer ministro debe abordar), mi agenda estaba repleta, el
número 10 es un entorno complejo y yo entraba y salÃa constantemente del
edificio", explicó.
"No se
puede esperar que un primer ministro investigue personalmente asuntos como
estos. TenÃa que confiar, y tenÃa todo el derecho a hacerlo, en lo que me
decÃan mis asesores de confianza", agregó.
Johnson
se vio obligado a dimitir en julio tras una acumulación de escándalos, incluido este,
bautizado por la prensa como "partygate".
- Eventual
retorno polÃtico -
En varias
ocasiones desde diciembre de 2021, el entonces primer ministro aseguró a los
diputados que en sus dependencias se respetaron "en todo momento" las
normas que él mismo habÃa impuesto contra una pandemia que dejó 220.000 muertos
en el Reino Unido, segundo mayor balance de Europa tras el de Rusia.
Pero acabó
admitiendo su "responsabilidad" cuando una investigación interna
denunció los "errores de liderazgo y juicio" de los "altos
cargos" implicados en esas reuniones con excesos de alcohol, altercados y,
en ocasiones, falta de respeto al personal de seguridad y limpieza.
Johnson, de 58
años, que durante décadas logró capear incontables tormentas polÃticas tampoco
dimitió por esto.
Sin embargo,
acabó siendo empujado a la salida poco después, tras tres convulsos años en el
poder, por su propio Partido Conservador por nombrar a un responsable de grupo
parlamentario acusado de abusos sexuales.
Fue para muchos
la gota que colmó el vaso de un lÃder cuya integridad estaba crecientemente en
entredicho, un excampeón electoral convertido entonces en un lastre para la
imagen de los conservadores.
Sus partidarios,
sin embargo, denuncian una traición y luchan por su regreso polÃtico antes de
las próximas elecciones generales, previstas en enero de 2025 a más tardar.
Pero, si ahora
la comisión de investigación decide que Johnson mintió intencionadamente podrÃa
recomendar una sanción que asestase un golpe mortal a esa aspiración.
- "Permitió
que continuara" -
Al término de la
investigación, la Cámara de los Comunes al completo votará una eventual
suspensión de su escaño de diputado y si esta fuese superior a 10 dÃas podrÃa
provocar una elección anticipada en la circunscripción de Johnson, en el
noroeste de Londres, que lo dejara fuera del tablero polÃtico.
Este mes, la
comisión estableció en un informe provisional que el exlÃder debÃa haber visto
que se estaban incumpliendo las normas anticovid en sus oficinas.
Publicó
fotografÃas inéditas y mensajes de WhatsApp en los que sus asesores se
esforzaban por encontrar una justificación pública para las fiestas.
Entre las
últimas pruebas figura también la declaración de un funcionario de Downing
Street según el cual Johnson "a menudo veÃa y se unÃa" a esas
reuniones durante los confinamientos y "tuvo la oportunidad de
atajarlas".
"Pudo ver
lo que estaba ocurriendo y permitió que continuara", añadió.
El exasesor principal de Johnson, Martin Reynolds, también afirmó que, antes de una comparecencia parlamentaria del primer ministro a principios de diciembre de 2021, le preguntó "si era realista sostener que se habÃan respetado todas las directrices en todo momento".