EFE
Bogota,
Colombia
El
expresidente colombiano Álvaro Uribe (2002-2010) salió a la defensa del actual
mandatario, Gustavo Petro, su némesis política, al pedirle a un militante de su
partido, el derechista Centro Democrático, que no insultara al líder de
izquierdas.
En un acto
del Centro Democrático al que asistía el expresidente, uno de los asistentes
llamó a Petro "guerrillero", un calificativo que la opinión y
múltiples miembros del Centro Democrático han usado en varias ocasiones para
apelar al presidente, quien en su juventud integró la guerrilla del M-19.
Uribe, al
escuchar el término, desde un pequeño escenario en el Foro del Centro
Democrático 'Las regiones vuelven al centro', desde Montería, le interrumpió
para decir: "en mi presencia, ningún insulto al presidente de la
República".
"Todo
lo que se quiera decir de oposición con argumentos bien, pero ningún
insulto", aseguró Uribe, en un mensaje que ha retuiteado el propio Petro,
que fue uno de sus más críticos adversarios desde el Congreso cuando Uribe era
presidente, pero que ahora guardan una curiosa relación de no agresión.
Uribe y
Petro se han reunido en varias ocasiones desde que el líder de izquierdas ganó
las elecciones del pasado julio para tratar diversos asuntos y donde han
mostrado un cauteloso entendimiento, a pesar de las distancias políticas.
Sin
embargo, Uribe, que tras ser el presidente más influyente de las últimas
décadas y el único que solo ha necesitado una vuelta para salir electo, ahora
vive en un aparente segundo plano, ha expresado su oposición a algunas de las
reformas que quiere emprender Petro.
Sobre todo, se ha mostrado reacio en el terreno económico, por la posibilidad de que las reformas constriñan la economía o ataquen a los empresarios, que son su feudo político.