Andrew
Beatty
Sidney,
Australia
Meta
desplegó el viernes la suscripción de pago para Facebook e Instagram en
Australia y Nueva Zelanda, países que servirán de prueba para este nuevo
servicio de verificación hasta ahora gratuito en estas redes sociales.
Ante la
caída de ingresos publicitarios, la empresa matriz de Facebook e Instagram
lanzó una prueba piloto de esta suscripción de pago en estos países oceánicos
antes de extenderlo a otros mercados.
El servicio costará 11,99 dólares estadounidenses en
la web y 14,99 dólares en las plataformas móviles de iOS y Android.
Desde
este viernes, los usuarios de estos países que presenten sus documentos de
identidad podrán solicitar un distintivo para garantizar su autenticidad y
obtener mayor protección ante las suplantaciones, acceso directo a la atención
al cliente y más visibilidad, según Meta.
"Gradualmente
vamos a desplegar el acceso a Meta Verified en Facebook e Instagram y esperamos
alcanzar un 100% de disponibilidad en los primeros siete días desde el
lanzamiento", dijo un portavoz de la empresa a la AFP.
Meta
Verified no estaba disponible en
Sídney en el primer día del lanzamiento después de varios intentos de acceso al
servicio.
"Esta
nueva herramienta trata de aumentar la autenticidad y la seguridad en nuestros
servicios", dijo el consejero delegado de Meta, Mark Zuckerberg, en un
comunicado publicado en estas redes sociales.
También
permitirá a Meta obtener nuevos ingresos de sus 2.000 millones de usuarios.
Los
expertos consideran que el ejército de creadores, influyentes y celebridades
que viven de estas redes pueden ser los principales usuarios de este servicio,
dado que muchos se quejan de las dificultades para resolver problemas técnicos
y administrativos.
Jonathon
Hutchinson, profesor de comunicación digital en la Universidad de Sídney,
considera que este "servicio VIP" puede ser "una propuesta de
valor para un creador de contenido".
Pero
antes del lanzamiento, los usuarios ordinarios parecían menos entusiastas.
"Creo
que la mayoría de mis amigos se reirán de ello", dijo Ainsley Jade,
una usuaria de 35 años en Sídney. "Definitivamente no pagaría por esto, ni
hablar", agregó.
Algunos analistas también mostraron sorpresa por la adopción por parte de Meta de este servicio de verificación semanas después de que su rival Twitter haya hecho lo mismo con unos resultados lejos de los esperados.