UNI CEF/Ricardo Rojas Un niño observa el río Sanate en la provincia de Higuey, República Dominicana.
Sería el primer país de América Latina y el Caribe en ingresar a ese
instrumento que busca reforzar las medidas locales, nacionales y regionales
para proteger y asegurar la cantidad y calidad de los recursos hídricos
transfronterizos y su uso sostenible. Originalmente, el convenio se creó para
su adopción e implementación en Europa.
Con la
intención de adherirse al Convenio del Agua de la ONU, República Dominicana ha
empezado a tomar medidas para garantizar la sostenibilidad de sus
recursos naturales por medio de una mejor conservación, gestión y uso
sostenible de sus aguas transfronterizas, informó este jueves la Comisión Económica
de la ONU para Europa (UNECE), auspiciante de ese instrumento
internacional.
El país
caribeño comparte varias cuencas transfronterizas con Haití y
esos recursos son fundamentales para el bienestar de la población, la salud de
los ecosistemas y el desarrollo económico al ser necesarios en la agricultura,
la energía, la industria y el uso doméstico.
República
Dominicana es uno de los países más vulnerables al cambio climático,
por lo que es crucial una cooperación para evitar o mitigar los efectos de los
fenómenos meteorológicos extremos.
La dirección de comunicación de la ONU, remitió a la redacción de Arosnews, la información.
La
secretaria del Convenio del Agua, Sonja Koeppel, argumentó que ese instrumento
puede proporcionar un marco muy útil para trabajar en la conservación
de las cuencas y la mitigación del impacto del cambio climático en
República Dominicana, a través de la gestión integrada y sostenible de las
cuencas.
“El
Convenio del Agua puede ofrecer su marco único y 30 años de experiencia sobre
el terreno en multitud de contextos para ayudar a afrontar esos retos”,
afirmó.
Uso razonable y equitativo del
agua compartida
El
Convenio del Agua es un marco jurídico intergubernamental de
las Naciones Unidas que cuenta con 47 Partes y que exhorta a prevenir,
controlar y reducir los impactos negativos sobre la calidad y la cantidad del
agua a través de las fronteras, así como a usar las aguas compartidas de forma
razonable y equitativa, y a garantizar su gestión sostenible mediante la
cooperación.
De
adherirse al Convenio, República Dominicana se beneficiaría del apoyo
internacional para el desarrollo sostenible y podría reforzar la
estabilidad y la paz.
Además,
la nación insular se posicionaría como un líder regional para la
conservación de los recursos naturales.
Región rica en agua
América
Latina y el Caribe es una de las regiones del mundo más ricas en recursos
hídricos en la que 22 de sus 33 países comparten aguas transfronterizas,
ya sea lagos, ríos o acuíferos.
El 71%
del flujo total de agua superficial en la región proviene de cuencas
hidrográficas compartidas que son fundamentales para el desarrollo social,
económico y la conservación de los ecosistemas. La cooperación en
materia de aguas transfronterizas es una condición previa del desarrollo
sostenible, la paz y la estabilidad.
La UNECE
indicó que la región no está bien encaminada hacia el cumplimiento del
Objetivo de Desarrollo Sostenible referente a la gestión integrada de los
recursos hídricos, incluso mediante la cooperación transfronteriza, pese a que
los países que la integran se comprometieron con la Agenda 2030.
En este
sentido, consideró que la adhesión de Republica Dominicana podría catalizar
un impulso a la cooperación en materia de agua en toda la región.