AP
Madrid
Las
autoridades mexicanas localizaron en un tráiler abandonado a 94 migrantes, en
su mayoría centroamericanos, en una carretera del estado de Veracruz, en el
Golfo de México, anunció el jueves el gobierno estatal.
El
hallazgo fue confirmado por el director de Atención a Migrantes de la
gobernación del estado de Veracruz, Carlos Enrique Escalante, quien dijo a The
Associated Press que el tráiler fue encontrado la noche del miércoles en la
carretera Acayucan-Sayula de Alemán del estado con decenas de migrantes en su
interior.
Escalante
indicó que algunos de los migrantes, desesperados por el calor y la falta de
oxígeno, rompieron la caja del tráiler y comenzaron hacer ruido, lo que
permitió alertar a los habitantes de la zona que llegaron para auxiliarlos y
sacarlos de la unidad.
“Desgraciadamente
hubo algunos que se tuvieron que aventar de la parte superior del tráiler y
pues sufrieron esguince”, precisó el funcionario.
Los 94
migrantes, provenientes de Guatemala, Honduras y El Salvador, quedaron bajo el
resguardo de los agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) de Veracruz
mientras se concluyen los trámites para la deportación.
Escalante
señaló que de acuerdo a las informaciones aportadas por algunos de los
migrantes en el tráiler iban unas 400 personas, muchas de las cuales lograron
escapar antes que llegaran las autoridades, pero aclaró que hasta el momento no
se tiene un registro oficial de los ocupantes de la unidad.
La
Fiscalía General de Veracruz ya inició una investigación sobre el caso. En el
evento no hubo detenidos.
Un evento
similar se registró el 27 de junio a las afueras de San Antonio, Texas, donde
fue localizado un tráiler abandonado con 73 migrantes, de los cuales 53 murieron
por asfixia. Por el caso fueron detenidas cuatro personas entre ellas el chofer
de la unidad.
Un nuevo
grupo de unos 2.000 migrantes, mayoritariamente venezolanos y centroamericanos,
partió a inicios de semana del sur de México con el objetivo de llegar a la
frontera con Estados Unidos.
En los
últimos meses varios contingentes similares partieron de Tapachula, casi en la
frontera con Guatemala, en caravanas que se disolvieron solo días después,
cuando las autoridades mexicanas les ofrecían documentos para transitar por el
país.
La
Guardia Nacional, que el año pasado optaba por frenar los éxodos masivos de
extranjeros indocumentados, se limitó el lunes a escoltar al grupo y agilizar
el tráfico vehicular.
Sin
embargo, el jefe del ejército mexicano, Luis Cresencio Sandoval, dijo la semana
pasada que se había reforzado el despliegue de fuerzas federales y estatales
para evitar el fluyo de migrantes de forma irregular.
Las
caravanas son sólo una ínfima parte de los miles de migrantes que cruzan cada
día ilegalmente a Estados Unidos ya que la mayoría lo hacen utilizando a
traficantes que los transportan de diferentes maneras.
En el
primer semestre del año unas 58.000 personas solicitaron refugio en México,
7.000 más que el mismo periodo del año pasado. Un 70% de ellas lo hicieron en
las oficinas de Tapachula.
Recientemente, las autoridades fronterizas estadounidenses están bloqueando el paso a migrantes en la frontera con México con más frecuencia que en cualquier otro momento en al menos dos décadas. En mayo hubo casi 240.000 interceptaciones, un tercio más que hace un año.
