EFE
Washington
Los
Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas
en inglés) informaron este viernes que han detectado por primera vez dos casos
de viruela del mono en niños.
En un
comunicado, los CDC indicaron que uno de los menores infectados es un residente
en California de menos de dos años, mientras que el otro se encontraba en
EE.UU., pero no reside habitualmente en el país.
Los
responsables sanitarios indicaron que ambos casos están relacionados y que lo
más probable es que los niños se infectaran en casa por transmisión de un
familiar.
Ambos
presentan síntomas, pero se encuentran en buen estado de salud y están
recibiendo tratamiento.
La
viruela del mono no se propaga fácilmente entre humanos: el contagio se produce
a través del contacto cercano con piel infectada, fluidos corporales o gotas
respiratorias de una persona infectada con la que se mantienen relaciones
sexuales.
Se trata
de un virus distinto al de la viruela y que se está transmitiendo fuera de su
zona endémica habitual (África Central y Occidental), por lo que es necesario
ejercer sobre él un control epidemiológico estricto.
Se
considera que una persona es contagiosa desde el inicio del enantema -lesiones
en la mucosa oral- hasta que las lesiones se curan y se forma una nueva capa de
piel.
Por este
motivo, las personas infectadas deben permanecer aisladas hasta que todas las
lesiones cutáneas se hayan curado, y evitar especialmente el contacto cercano
con personas inmunodeprimidas.
El
período de incubación puede oscilar entre 5 y 21 días, y el cuadro clínico
suele iniciarse con una combinación de síntomas como fiebre, cefalea, dolores
musculares, lesiones características en piel y ganglios inflamados.
Con
respecto a su gravedad, los epidemiólogos apuntan que los casos del brote
actual están siendo más leves que los descritos en África Occidental, y que
apenas están generando ingresos hospitalarios. Sin embargo, recuerdan, las
lesiones en la piel y las mucosas sí resultan muy molestas.