Santo Domingo, RD.-Para el doctor
Nelson Rodríguez Monegro, ex director del Servicio Nacional de Salud (SNS),
la denuncia hecha por su actual incumbente, doctor Mario Lama de “enramados” o “negocios” dentro y alrededor de los
hospitales, es una realidad que viene desde hace
muchísimos años contra la cual luchó y no pudo erradicar.
“El doctor Mario Lama tiene mucha
razón y me apena que todavía no hemos avanzado sobre eso, a pesar de que
nosotros luchamos mucho por erradicar esa práctica, empoderé personas para
investigar casos específicos, pero no se llegaba a nada concreto, porque hay
un entramado de complicidades enorme en eso y esa es la realidad”, señaló el
ex director del SNS, puesto al que renunció en el 2018.
Rodríguez Monegro señaló que “es
cierto que en los hospitales se roban equipos, que dañan equipos y que el
personal del hospital recibe un 30% por derivar pacientes de los hospitales a
esos centros, es decir que todas esas cosas se han convertido en un
entramado de corrupción, en un entramado totalmente delincuencial, lo que
venimos denunciando desde hace muchos años”, enfatizó.
Para combatirlo
En opinión Rodríguez Monegro la forma de combatir esos conflictos de intereses
es que los hospitales cuenten con todos equipos y los servicios en las mejores
condiciones y que haya un rigor, porque no se puede tener trabajando en el
hospital a personas que tienen establecimientos de salud que compitan
con el centro público.
También, ve imprescindible aumentar
el rigor de supervisión y vigilancia para detectar ese tipo de conflictos de
intereses.
El origen de todo
Al referirse al origen de esa vieja práctica, el ex funcionario, quien ha
ocupado diferentes funciones en el campo sanitario estatal del país, explica
que surgió como consecuencia de la precariedad de muchos hospitales en términos
de laboratorio, banco de sangre, deficiencias en equipos de rayos equis y
sonografías, entre otros, dando pie a que empezaran a proliferar una serie de
servicios privados en los entornos de los hospitales.
De ahí, agregó, que se va a encontrar
laboratorios, bancos de sangre, centros de sonografía y otros métodos
diagnósticos que surgen como alternativas a las deficiencias de los hospitales.
Qué pasa, se preguntó, y respondió que muchos de esos negocios tienen vínculos
con personas que trabajan en los hospitales y ahí es que comienza el conflicto
de interés.
Un caso que no olvida
Recordó que cuando dirigió el hospital Toribio Bencosme, de Moca, se encontró
con un médico que todos los análisis clínicos que les hacía a los
pacientes que iban al hospital los enviaba a un laboratorio privado, a
pesar de que el laboratorio del hospital estaba en mejores condiciones.
Dijo que como detectó eso, llevó al
médico a conocer bien el laboratorio del hospital y posteriormente fueron
juntos a hacer una visita al laboratorio clínico privado en cuestión, y al final
le preguntó al facultativo cuál de los dos tenía mejor centro de bioanálisis,
y ante su respuesta de que era el centro público, le hizo la pregunta de las
razones por las que refería los pacientes.
El ex director del SNS señaló que la
razón de esos referimientos era que ese centro privado le daba un 30%
de los pagos por servicios que hacían los pacientes que el médico le
remitía.
Señaló que se han dado casos también
de que un personal deja caer una de las piezas del sonógrafo para que se
dañe. “Hay 10 mil formas de cómo afectar y dañar un equipo, lo que gravita
sobre esos hospitales”, señaló.
Una gran lucha
Explicó que a veces se
encuentran equipos muy sofisticados en hospitales que se dañan porque
no se usan, porque no saben usarlos, y se debe asegurar la capacitación
del recurso humano y el tratamiento preventivo para ser reparados en caso de
dañarse.
Recordó que en tiempos muy remotos se
podían encontrar clínicas privadas que estaban equipados con los insumos del
hospital, incluyendo el instrumental quirúrgico, sobre el cual, dijo,
siempre hay que estar muy vigilante porque hay pinzas muy costosas que pueden
desaparecer y recordó casos donde se perdieron equipos completos.
Fuente:Externa