El
niño Rayan Oram, de cinco años, fue hallado sin vida tras pasar cinco días en
el fondo de un pozo de 32 metros, según un comunicado del Gabinete de la Casa
real de Marruecos.
La
información publicada por medios locales incluyó una declaración de la corte
real que decía que el rey Mohammed VI llamó a los padres del niño para
expresar sus condolencias.
“Tras
el trágico accidente que costó la vida al niño Rayan Oram, Su Majestad el rey
Mohamed VI llamó a los padres del difunto, fallecido tras caer a un pozo”,
precisó el comunicado en árabe.
La
nota señaló que el rey agradeció los esfuerzos de las autoridades y
fuerzas públicas, la sociedad civil y la “fuerte” y “amplia” solidaridad expresada
a los familiares del pequeño.
Un
reportero de Associated Press que se encontraba en el lugar vio al
niño envuelto en una manta amarilla después de ser extraído del túnel excavado
específicamente para el rescate. Sus padres habían sido escoltados a una
ambulancia antes de que saliera el niño.