La farmacéutica
estadounidense Johnson & Johnson cerró de forma discreta a finales del año
pasado su fábrica más importante y la única que fabricaba lotes utilizables de
su vacuna contra el coronavirus, según reveló este martes el periódico The New
Time.
La planta, ubicaba
en la ciudad holandesa de Leiden, fabrica ahora en su lugar una vacuna
experimental pero potencialmente más rentable para proteger de un virus no
relacionado con el COVID-19.
Según el citado
diario, podría reanudar dentro de unos meses la producción de la vacuna del
coronavirus, pero esta interrupción podría reducir en cientos de millones de
dosis el suministro.