El presidente, Joe Biden, y su homólogo
ruso, Vladimir Putin, hablarán por teléfono el próximo martes, en un momento en
que las tensiones entre Estados Unidos y Rusia se intensifican a causa del
aumento de las tropas ese país en la frontera ucraniana, lo que se considera
una señal de una posible invasión.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, confirmó el sábado los planes para la tan esperada llamada y dijo que tendrá lugar por la tarde.
Funcionarios ucranianos han dicho que Rusia podría invadir el país el próximo mes. El ministro de Defensa ucraniano, Oleksii Reznikov, aseguró que estiman que hay 94,300 tropas rusas cerca de Ucrania y en la península de Crimea, anexa a Rusia y que podría existir una “escalada” en enero.
"A pesar de la incertidumbre sobre las intenciones y el momento, debemos prepararnos para todas las contingencias mientras trabajamos para asegurarnos de que Rusia cambie de rumbo", dijo. "Estados Unidos se ha comprometido intensamente con aliados y socios sobre este tema, y directamente con el presidente Putin".
En el medio está Ucrania que en estas horas despliega a la mitad de su ejército en la frontera este para intentar detener una posible invasión de las fuerzas rusas que se siguen acumulando del otro lado de la línea que separa a ambos países. Desde Moscú niegan que tengan intención de cruzar nuevamente la frontera para defender a los separatistas prorusos de la región de Dombas.
El presidente Vladimir Putin exige garantías contra la expansión de la OTAN, la alianza militar occidental, hacia el este. Mientras que Estados Unidos y los aliados de la OTAN, debaten su intervención. El menor error de interpretación puede lanzar una guerra.