Estados Unidos investigan los primeros posibles casos de “síndrome de La
Habana”, que ha causado lesiones cerebrales a diplomáticos y funcionarios
Hace
referencia a un conjunto de signos y síntomas médicos declarados por el
personal de las embajadas de Estados Unidos y Canadá en Cuba, que se
remonta a fines de 2016; y posteriormente en algunos otros países.
En 2017, el entonces presidente
de los EE.UU., Donald Trump, acusó a Cuba de perpetrar ataques no
especificados que causaron estos síntomas. Posteriormente, Estados Unidos
redujo al mínimo el personal de su embajada en respuesta a los supuestos
ataques.
En 2018,
varios diplomáticos estadounidenses en China informaron de problemas
similares a los declarados en Cuba; así como agentes encubiertos de la CIA que
operaban en otros países y que estaban negociando con estos sobre formas de
contrarrestar las operaciones encubiertas de Rusia.
Estudios posteriores que tuvieron
como sujetos a los diplomáticos presuntamente afectados en Cuba, publicados en
la revista JAMA en 2018, encontraron evidencia de que los
diplomáticos habían sufrido algún tipo de lesión cerebral, pero fueron
incapaces de determinar la causa de estas lesiones.
Dos funcionarios de la Casa Blanca que trabajan en el Comité de Seguridad Nacional (NSC, por sus siglas en inglés), reportaron a finales de 2020 síntomas compatibles con una misteriosa enfermedad que afectó a numerosos miembros de la delegación estadounidense en Cuba -conocida por ello como “síndrome de La Habana”- y cuyo origen todavía no logra ser determinado.
El incidente en Washington DC ocurrió un día después de la elección
presidencial, en noviembre. El segundo caso se registró unas semanas más tarde,
durante el mes de diciembre.
Los síntomas también fueron experimentados por
decenas de diplomáticos y personal allegado alrededor del mundo. Los primeros casos se registraron a
finales de 2016 en Cuba. En ese entonces, empleados de las embajadas de Estados
Unidos y Canada reportaron síntomas y signos de una enfermedad rara, que luego
se replicaron en varios lugares del mundo.
Según New
York Times, se han identificado 130 casos de daño cerebral relacionados con el síndrome de La
Habana en diplomáticos y funcionarios de Defensa de los Estados Unidos. Pero a
excepción de estos dos casos en Washington, el resto ocurrieron en el exterior.
La comunidad de inteligencia aún no determina qué es lo
que está causando los síntomas. Algunos incluso descreen que se trate de un
ataque, por no poder identificar la tecnología que los genera, aunque todos
coinciden que no puede ser casualidad.