Colombia ganó la primera opción. El 50,2% decidió votar en contra del acuerdo de paz entre el Gobierno y las FARC, por el 49.7% que se decantó por el ‘sÃ’. La abstención, de más del 60% y la pésima imagen de la guerrilla han sido determinantes en el resultado de la votación, que ninguna encuesta supo predecir.
El departamento del Caquetá estaban decidido por su voto, No. Han vivido la violencia, la extorsión y el secuestro y no estaban dispuestos, como asà han demostrado en las urnas, “a perdonar sin cárcel”. Su dolor ha sumado más de seis millones de votos. Suficientes para ganar. Ni las FARC ni el Gobierno de Juan Manuel Santos han sido capaces durante los últimos cuatro años de convencer a los colombianos de que sus acuerdos eran una alternativa a medio siglo de conflicto armado.
Jose "Pepe" Mujica president de Uruguay en una entrevista con El Tiempo publicada el pasado 24 de septiembre dejó claro lo que piensa acerca de la decisión que deben tomar los colombianos: “Si Colombia dice No, darÃa la impresión de ser un pueblo esquizofrénico que se aferra a la guerra como forma de vida. América Latina difÃcilmente lo entenderÃa”, le dijo a Laura Gil.
